El periodo vacacional inicia el lunes 11 de abril y concluye el viernes 22 de abril

Semana Santa: 5 cuidados que necesita un niño para sentirse feliz en casa

De acuerdo con especialistas, los menores podrían perder organización en su vida si no se gestionan adecuadamente las vacaciones

El regreso a clases será el 25 de abril.
El regreso a clases será el 25 de abril.Foto: Especial.
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La Semana Santa está a la vuelta de la esquina, por lo que muchos padres de familia ya se están preparando para salir de vacaciones en familia, o bien para tener a sus hijos en casa durante varios días.

Con base en el calendario de la SEP 2022, dicho periodo vacacional inicia el lunes 11 de abril y concluye el viernes 22 de abril, por lo que el regreso a clases se tiene considerado para el lunes 25 del mismo mes.

La psicóloga Pilar González, egresada de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), comentó para La Razón que si no se gestionan adecuadamente las vacaciones de los niños y de las niñas dentro de casa durante Semana Santa, los menores podrían perder organización en su vida.

“Las vacaciones que no se llevan a cabo de manera estructurada, podrían desorganizar la vida de los menores de manera temporal o permanente; por lo que esto podría permear en sus hábitos y estructuras esenciales, las cuales son fundamentales para su estabilidad emocional”. Mientras más orden tengan los niños, mejor se sentirán emocionalmente y por ende serán felices, comentó la psicóloga.

Para mitigar el gran reto de los padres de familia de tener a los niños y niñas en casa durante Semana Santa, la psicóloga dio algunos tips para estructurar dicho periodo vacacional, de tal manera que los menores se sientan felices y protegidos en casa. 

  • Cuidado físico:

Se debe establecer una rutina para despertar e irse a la cama. También se deben de mantener horarios fijos para los alimentos y fomentar una rutina para el aseo personal, baño, lavado de manos y de dientes.
  • Cuidado emocional:

Es importante observar el estado de ánimo del niño, preguntar cómo se siente y escucharlo sin juzgar. Ayudándole a reconocer sus emociones y a expresarlas de una manera adecuada y saludable.
  • Cuidado intelectual:

Se deben de buscar formas en las que el niño pueda desarrollar su aprendizaje, fomentando sus intereses y sus gustos. Puede ser por medio de la lectura, del dibujo o cualquier otra actividad, proporcionándole las herramientas para hacerlo.
  • Cuidado espiritual:

Es esencial cuidar la parte existencial del niño. Respetar su manera de ser, sus creencias y valores. Fomentar el agradecimiento y la importancia de su propia valía. Si se desea, hablarle sobre la existencia de un ser superior. 
La espiritualidad se puede dar de una manera natural, si el niño se encuentra en un ambiente de paz y serenidad, la cual le permita el disfrutar plenamente de su existencia cómo ser humano.
  • Cuidado social.

El niño debe desarrollarse en un ambiente sano, tanto en el hogar, la familia y la comunidad. Convivir con personas que lo hagan sentir visto, querido, valorado y respetado. Sobre todo que sus cuidadores sean confiables, donde se le garantice un lugar seguro física y emocionalmente.

De acuerdo con la experta, si los padres de familia no procuran seguir estas recomendaciones, la desorganización de la estructura del periodo vacacional podría perjudicar emocionalmente a los niños.

“Si no se tienen esos cuidados, pueden tener afectaciones en diferentes áreas de su vida, como no tener hábitos, tener baja autoestima, no sentirse queridos o aceptados y no tener recursos internos para afrontar de manera adecuada la vida”, insistió González.

Todas estas recomendaciones son de manera general; sin embargo la psicóloga Pilar González hizo hincapié en que si los padres de familia notan que su hijo y/o hija tiene un problema severo en el ámbito emocional es recomendable asistir a terapia.

lemm.