Guía para combatir el Financiamiento al Terrorismo

UIF busca atajar financiamiento a grupos criminales en organizaciones sociales

Se trata de un catálogo de cinco medidas para que las OSFL eviten que grupos criminales las utilicen como plataformas para el movimiento de recursos ilegales

Santiago Nieto, titular de la UIF.
Santiago Nieto, titular de la UIF.Foto: Cuartoscuro (Archivo).
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La Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) presentó la “Guía para combatir el Financiamiento al Terrorismo”.

Se trata de un catálogo de cinco medidas de seguridad y recomendaciones para que Organizaciones Sin Fines de Lucro (OSFL) eviten que grupos criminales las utilicen como plataformas para el movimiento de recursos ilegales.

La UIF reconoce que la Evaluación Nacional de Riesgos de Lavado de Dinero y Financiamiento al Terrorismo estableció que en México no existe el “terrorismo doméstico” y tampoco se ha detectado que algún grupo terrorista internacional haya mostrado intenciones de atentar contra intereses nacionales o extranjeros desde el territorio nacional, se debe tener conciencia de que es una amenaza presente en todo el mundo

Derivado de este análisis, dice la dependencia es que se deben tomar acciones para mitigar los riesgos que se identifiquen en cada actividad económica o social.

En el caso de Enfoque Basado en Riesgos (EBR) la UIF destaca que cada OSFL debe entender los riesgos que enfrenta y tomar las medidas pertinentes para sus circunstancias particulares sobre las actividades que realiza, cómo y dónde las realiza.

Otro aspecto que cuidar es la Debida Diligencia del Usuario, es decir, se debe tener un control sobre las personas y organizaciones que dan o reciben dinero y también las que trabajan de forma cercana a las OFSL.

La UIF recomendó que se armen expedientes sobre cada donante especificando las operaciones y fondos de donde provienen las donaciones. Todas las operaciones, incluso aquellas que no rebasan los 278 mil 884 pesos, considerado el umbral de operaciones sospechosas que deben ser reportadas a la Secretaría de Hacienda, deben adoptar como norma estos avisos como una forma de autorregulación.

Todos los donativos que reciban las OSFL, recomendó la UIF, deben ser transparentes y los comprobantes deberán dar cuenta del origen y destino. Los estados financieros deben estar actualizados y completos para evitar malos manejos.

Las OSFL deben funcionar con un documento de gobernabilidad que establezca los propósitos, estructura, prácticas de presentación de informes y las pautas para cumplir con leyes locales. Para prevenir que haya abuso de los fondos por parte de los socios, deben verificar su reputación, a través de criterios de información pública, incluyendo listas de sanciones nacionales o de Naciones Unidas, antes de aceptar los donativos.

Con la “Guía para combatir el Financiamiento al Terrorismo”, aplicable a las Organizaciones sin Fines de Lucro, las autoridades financieras establecieron diversas herramientas para que las organizaciones sociales que reciben donativos en efectivo o a través del sistema financiero nacional reduzcan la posibilidad de que grupos criminales aprovechen su vulnerabilidad para lavar activos o financiar al terrorismo.

“Estas organizaciones (Sin Fines de Lucro), con independencia de que lleven a cabo o no la Actividad Vulnerable en la recepción de donativos, puedan mitigar el riesgo de ser utilizadas en la realización de actos u operaciones relacionados con el Financiamiento al Terrorismo”, dijo la dependencia en comunicado de prensa.

Además, la elaboración de la guía contribuye al cumplimiento del estándar internacional en materia de Financiamiento al Terrorismo, en especial con la Recomendación 8 del Grupo de Acción Financiera Internacional (GAFI).