Con decenas de urnas vacías Evo se perfila a la reelección

Las primeras elecciones primarias de Bolivia concluyeron sin incidentes, con una importante participación de militancia oficialista, pero con la marcada ausencia de la oposición, que rechazó los inéditos comicios en los que Evo Morales busca medir el apoyo ciudadano que tiene con miras a las generales de octubre, en la que busca prolongar su mandato de 12 años.

“Salvo contadas excepciones, todas las mesas de votación funcionaron normalmente; por ser voluntaria han participado las personas que consideraban que tenían que hacerlo”, declaró a la televisión estatal la presidenta del Tribunal Electoral de Santa Cruz, Sandra Kettels.

Kettels indicó que no pasaba de 3 por ciento el porcentaje de mesas de sufragio que no funcionaron. El presidente del Tribunal Electoral de Oruro (oeste), Ruddy Huayllas, declaró por su parte que “la participación ha sido como se preveía, casi sólo oficialistas y muy pocos opositores”.

Las nueve candidaturas inscritas por otros tantos partidos y frentes, entre ellas la de Morales, quedarán habilitadas para participar en las elecciones generales de octubre si obtuvieron al menos un voto.

Usuarios de redes sociales comenzaron a difundir la poca afluencia de la población a los recintos de votación.

”Las primarias han fracasado como maniobra para legitimar la candidatura ilegal de Evo. Al terminar la jornada, todo el país las califica de ridículas y de despilfarro”, escribió en su cuenta en Twitter Samuel Doria Medina, un ciudadano inconforme.

“Saludamos a los militantes del MAS por su movilización (...) Estamos profundizando la democracia y estamos seguros que en el futuro habrán muchos candidatos”, resaltó al respecto el presidente Evo Morales, tras emitir su voto, ayer.

La declaración presidencial destacó la importancia de que los militantes políticos participen en la designación de los candidatos, aunque en esta primera ocasión no pudieron elegir entre dos o más opciones sino sólo confirmar o rechazar a los candidatos designados por las cúpulas de los partidos.

“Con las elecciones primarias, la designación de candidatos vuelve a las manos del pueblo organizado en militancia, que decide libremente quiénes serán sus representantes en las justas electorales. Ahora se elige postulantes con voto y no con plata”, tuiteó.