El EI invade bastiones rusos en Siria y mata a 148 personas
Al menos 148 personas murieron y unas 200 resultaron heridas durante siete atentados, reivindicados por el Estado Islámico (EI), en las ciudades sirias de Tartous y Jabla, bajo control del gobierno.
El primer reporte reveló que 73 personas perdieron la vida en cuatro explosiones en Jabla, en la provincia de Latakia, mientras que 48 fallecieron por tres explosiones en Tartous, ubicadas en la costa mediterránea, reportó el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH).
Una actualización posterior detalló que habían muerto otras 27 personas en ambas ciudades.
En Jabla, un vehículo cargado con explosivos estalló primero cerca de una estación de autobuses y poco después dos suicidas detonaron los cinturones bomba que llevaban adheridos a sus cuerpos en el mismo lugar.
Un tercer kamikaze hizo explotar su carga en las proximidades de la Dirección General de Electricidad y cerca de la entrada de ambulancias de un hospital en Jabla.
En Tartous, otro coche bomba explotó a la entrada de otra estación de autobuses y poco después dos suicidas detonaron en el interior del lugar los artefactos explosivos que llevaban, según el OSDH.
El director de la OSDH, Rami Abdel Rahman, consideró que se trata de uno de los peores ataques contra estas dos ciudades costeras desde el inicio del conflicto en Siria, en marzo de 2011.
Según la agencia de noticias Amaq, vinculada al EI, combatientes de este grupo extremista perpetraron los ataques contra concentraciones de “alauíes”, secta que profesa el presidente sirio Bashar al Assad, en Jabla y Tartous.
Pese a que el EI asumió la autoría de los ataques, la televisión siria aseguró que el grupo armado Movimiento Islámico de los Libres de Sham ha reivindicado estos atentados.
Estos atentados son los primeros de este tipo registrados en las regiones costeras de las autoridades sirias de Latakia y Tartous, los cuales habían permanecido al margen del conflicto sirio, iniciado en marzo de 2011.
Los atentados y enfrentamientos se han incrementado en Siria en las últimas semanas, mientras las grandes potencias se esfuerzan por revivir un cese al fuego y resucitar las conversaciones de paz para hallar una solución política a la guerra, que ha dejado más de 270 mil muertos.
Esto, a pesar de que el grupo radical que opera desde 2014 perdió el diez por ciento del territorio que ocupa en Siria e Irak, según una investigación de la compañía de seguridad Conflic Monitor of ISIS.
Desde febrero pasado, los radicales se han replegado por distintos territorios del país de Medio Oriente.
La compañía de análisis aseveró que los ataques efectuados el mes pasado, que ascienden a 3 mil 119, provocaron daños severon en la infraestructura que ocupan los radicales y bajas en sus filas.
También influyó en el repliegue de las tropas la pérdida de ingresos y la reducción en el número de militantes que se adhieren a la organización.