EU, a 24 horas de vencer plazo: “No tenemos planes de cerrar la embajada”

Enviado en Caracas

A escasas horas de que se cumpla el ultimátum que impuso el presidente Nicolás Maduro para que personal diplomático de Estados Unidos abandonara el país, en esa representación consular la enorme bandera de las barras y las estrellas sigue ondeando.

Aunque la mañana de ayer Reuters y medios locales reportaron movilización de al menos una decena de camionetas que transportaban a familiares de personal de Estados Unidos al Aeropuerto Internacional de Maiquetía, escoltadas por policías, autoridades de la embajada no se pronunciaron al respecto y las actividades transcurrían con normalidad.

Incluso algunos empleados, quienes pidieron omitir su nombre por cuestiones de seguridad, informaron a La Razón que fueron llamados a presentarse a labores este fin de semana de manera rutinaria.

Ubicada en el privilegiado barrio de Valle Arriba, en Caracas, a 15 minutos del centro de la capital, la embajada de Estados Unidos cuenta con varios niveles subterráneos y la tarde del viernes no se veía ningún movimiento en el complejo, que sólo era resguardado en su entrada principal por dos integrantes de las fuerzas de seguridad de Venezuela, protegiéndose del sol debajo de un alero en la entrada del estacionamiento.

“No tenemos planes de cerrar la embajada. Estados Unidos mantendrá relaciones diplomáticas con Venezuela a través del gobierno del presidente interino Juan Guaidó, quien ha invitado a nuestra representación a permanecer en Venezuela”, indicó a esta casa editorial un vocero de Asuntos del Hemisferio Occidental del Departamento de Estado de Estados Unidos.

La ya de por sí ríspida relación entre Estados Unidos y Venezuela llegó a un punto límite luego que el pasado 23 de enero el presidente Nicolás Maduro instruyera a terminar los vínculos diplomáticos con esa nación, el primer socio comercial de la nación sudamericana y a la cual exporta productos y bienes por alrededor de 10.3 mil millones de dólares al año.

La disputa por la permanencia de personal diplomático en Venezuela ha escalado desde el pasado miércoles, con amenazas veladas del número dos del chavismo, Diosdado Cabello, quien comentó que en la lujosa zona en la que se encuentra la representación diplomática de Estados Unidos se podrían frenar servicios como la electricidad y el abasto de agua.

Sin embargo, Estados Unidos no piensa dejar que su bandera ya no ondeé más en el horizonte venezolano.