Ex halcón de Obama: es un error no atacar a Siria

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En Estados Unidos Barack Obama no sólo enfrenta las críticas de la población (el 53 por ciento la desaprueba) ante su manejo de la crisis en Siria, tras el ataque con armas químicas del 21 de agosto. A pesar de que sus posiciones son discordantes, los dos primeros secretarios de Defensa criticaron el manejo que el mandatario ha hecho ante la situación luego de que impusiera una línea roja al régimen de Bashar el Assad, ante la cual habría fuertes repercusiones.

Durante un foro organizado en Dallas, Robert Gates y Leon Panetta coincidieron en que Obama no debió pedir al Congreso que aprobara un ataque y se mostraron escépticos y a veces sarcásticos sobre las actuales negociaciones avaladas por Rusia para que Siria entregue su arsenal químico.

Mientras que para Gates, el único miembro del gabinete de la administración de Bush a quien Obama pidió quedarse, una acción militar sería “como arrojar gasolina sobre un incendio extramadamente complejo en Medio Oriente”. El antiguo colaborador del mandatario dijo que una incursión armada pondría a Estados Unidos, ante los ojos de muchas personas, como el villano, en lugar de El Assad.

Gates cuestionó si Irak, Afganistán o Libia no habían enseñado sobre las consecuencias no intencionales de la acción militar una vez que se puso en marcha.

En tanto, Panetta sostuvo que Obama debió haber cumplido su palabra. “Cuando el presidente de EU traza una línea roja, la credibilidad de este país depende del cumplimiento de su palabra”, subrayó.

Al ser cuestionado sobre los comentarios de sus antecesores, el actual secretario de defensa, Chuck Hagel, dijo que les tenía un gran respeto pero que no concordaba con sus puntos de vista.

Sobre la aprobación que solicitó Obama al Congreso en caso de requerirse una acción militar ambos coincidieron en que el mandatario corre el riesgo de ver disminuido su prestigio si es rechazada.

“Señor presidente, este Congreso tiene problemas hasta para ponerse de acuerdo sobre qué hora es”, concluyó Panetta.

SIRIA GARANTIZA CUMPLIMIENTO DE PLAZOS. El régimen sirio aseguró ayer que entregará a tiempo la información sobre sus arsenales químicos. Tras una reunión con el presidente Bashar el Assad, Serguéi Riabkov, viceministro de Exteriores ruso, recalcó que su país había recibido garantías de la parte siria de que entregará la información relativa a sus armas en el plazo previsto.

Conforme el plan acordado entre Rusia y EU la semana pasada, la información de los arsenales químicos del país árabe debe ser entregadas en La Haya en una semana.

El diplomático recordó que, según el acuerdo alcanzado entre rusos y estadounidenses el pasado viernes en Ginebra, Siria debe haber entregado su arsenal antes de la primera mitad de 2014.

Por otra parte, remarcó que Siria entregó a Rusia nuevas pruebas sobre el uso de armas químicas por parte de los rebeldes en Gutha Oriental, un suburbio de Damasco.

En tanto el secretario general de la OTAN, Anders Fogh Rasmussen, sostuvo que la opción de una intervención militar en Siria “debe seguir sobre la mesa” a fin de presionar al régimen de El Assad a que cumpla con su compromiso de entregar sus armas químicas.

Rebeldes desertan por rechazo a Al Qaeda

Desde comienzo del año el Ministerio de Reconciliación nacional ha recibido tres mil 260 solicitudes de reintegración por parte de combatientes de la oposición. En una entrevista con el diario español ABC, Ilias Samman, encargado de esa oficina, aseguró que 75 por ciento fue entregada en agosto.

“El liderazgo de las organizaciones extremistas y la falta de un modelo alternativo al del régimen han empujado a muchos rebeldes a desertar”, afirma el jefe de organismo. Por el momento el enemigo común mantiene unidas a las más de 300 brigadas opositoras, según los datos del ministerio, pero los choques internos son cada vez más frecuentes.