Macron admite fallas en medio de alto rechazo

Macron admite fallas en medio de alto rechazo
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El presidente Emmanuel Macron reconoció ayer fallas en su gobierno y prometió conducir al pueblo francés “de forma diferente”, en un ejercicio de autocrítica jamás visto desde que asumió el cargo, en mayo de 2017.

“No he conseguido reconciliar al pueblo francés con sus dirigentes”, dijo Macron a la cadena privada TF1.

Sentado en un hangar del portaviones Charles de Gaulle, el mandatario reconoció que su ejecutivo no ha dado la suficiente “consideración” a los franceses desde el inicio de su mandato.

“Nuestros ciudadanos quieren tres cosas. Que se les considere, que se les proteja y que se les aporte soluciones. No declaraciones: soluciones. Y no hemos aportado la suficiente consideración”, reconoció.

Las declaraciones se dieron tres días antes de una movilización en toda Francia de los llamados “chalecos amarillos”, un movimiento, cuyo nombre se refiere al chaleco fluorescente de emergencia de tránsito, que surgió de la sociedad civil para bloquear carreteras y autopistas y protestar contra los nuevos impuestos, en particular contra la subida de los precios de la gasolina y el diésel.

“Nuestros ciudadanos quieren tres cosas. Que se les considere, que se les proteja y que se les aporte soluciones. No declaraciones: soluciones. Y no hemos aportado la suficiente consideración”

Emmanuel Macron

Presidente de Francia

Ayer, una editorial del diario regional, L’Alsace, reconoció el acto de contrición del Ejecutivo francés: “El presidente siempre cerró los ojos, convencido de tener razón (…) Hoy, los abre al fin. Emmanuel Macron “se libra, lo cual es raro en él, a un ‘mea culpa’”, subraya por su parte el diario Le Parisien.

Macron hizo la semana pasada un recorrido por Francia para conmemorar el centenario del fin de la Primera Guerra Mundial (1914-18) que lo llevó a zonas pobres y desindustrializadas del norte y el este del país.

Fue ahí donde, según él, se enfrentó directamente a la “cólera” y la “impaciencia” de muchos franceses.

En octubre, Macron había sido interpelado en la calle por jubilados que se quejaban de sus pensiones. Citando al general De Gaulle, Macron les respondió: “Ustedes pueden hablar libremente, lo único que no tienen derecho a hacer es quejarse. El país iría mucho mejor sin” esas quejas.

El presidente francés también fue muy criticado cuando dijo a un joven desempleado que le bastaba con “cruzar la calle” para encontrar trabajo.

“Esta reconciliación entre la base y la cúspide es algo que considero no haber conseguido y por ello será ahora el centro de lo que me espera como labor en los próximos meses”, expresó Macron el pasado miércoles.

No obstante, al margen de los cambios en el método o en la forma de su administración, el mandatario reafirmó que mantendrá sin cambios el “rumbo” de su política para “transformar profundamente al país”, lo que llevará “no un año, sino todo el quinquenio” de su presidencia (2017-2022).

Emmanuel Macron ha sufrido un bajón récord de la popularidad desde el pasado verano y actualmente solo un 26 por ciento de los franceses tiene una buena opinión respecto a sus acciones, según el instituto demoscópico Odoxa de París.

Ese porcentaje ha disminuido unos 12 puntos porcentuales desde junio, destaca Odoxa en un sondeo publicado ayer  por “France Inter”.

Añade que es, con diferencia, el nivel más bajo de su mandato, iniciado en mayo de 2017.

Revira contra “indecencia” de Trump

El gobierno francés respondió el miércoles a una andanada de tuits de Donald Trump, al insinuar que el presidente estadounidense carece de “decencia elemental”, al haber efectuado sus ataques el día en que Francia recordaba a víctimas del terrorismo.

El vocero del gobierno francés, Benjamin Griveaux, dijo: “recordábamos el asesinato de 130 compatriotas hace tres años en París y Saint-Denis, de manera que responderé en inglés: la ‘common decency’ (decencia elemental) hubiera sido apropiada”.

Tras quedar aislado en una cumbre en Francia el fin de semana pasado, debido a su retórica nacionalista, Trump atacó al presidente Emmanuel Macron por su invitación a crear una fuerza de defensa europea y por aplicar aranceles al vino estadounidense. Incluso aludió a las bajas tasas de aprobación de Macron.

Los tuits pusieron de relieve las tensiones entre los mandatarios que antes trataban de mostrarse como amigos, así como la molestia de Trump ante las críticas por la manera como se comportó en Francia.

“La diplomacia no se hace vía tuits sino mediante discusiones bilaterales”, declaró Macron durante su reunión semanal del gabinete efectuada el pasado miércoles, según declaraciones de Griveaux.