May acude a Cameron para acabar con la crisis

May acude a Cameron para acabar con la crisis
Por:
  • andrea_perez_egido

En Londres

La derrota electoral de Theresa May fue sólo el primer revés que sufrió la líder tory de cara a las negociaciones del Brexit. Medios británicos reportaron ayer que la primera ministra británica tuvo que recurrir a su predecesor, David Cameron, para sofocar la “guerra” desatada dentro de su gobierno y que pone en duda su capacidad de liderazgo.

La consulta a Cameron resulta paradójica, pues el expremier tuvo que abandonar su cargo tras perder las elecciones en la que los británicos avalaron la salida de Gran Bretaña del bloque europeo. Según el reporte de la prensa local, Cameron fue visto esta semana entrando a Downing Street, por primera vez desde su dimisión en junio del 2016.

Antes de su encuentro con May, el propio David Cameron intentó mediar en la guerra abierta con declaraciones a The Evening Stantard, al criticar la falta de rumbo del partido tras perder la mayoría absoluta el pasado 8 de junio, pidiendo el fin de las luchas internas y reclamando la necesidad de ofrecer “una visión inspiradora a los británicos”.

“Nosotros, desde la centro-derecha, tenemos que inspirar una visión de cómo construir no sólo una economía fuerte, sino también una sociedad fuerte y una vida mejor”, aseguró el expremier británico al diario londinense.

Ayer May hizo un llamado público a sus ministros para que entierren sus rencillas. En un discurso ante el influyente comité parlamentario 1922, la premier lanzó una inusual súplica a los miembros de su gabinete y los diputados conservadores: “No más quejas ni chismes. La elección es entre Jeremy Corbyn o yo, y nadie lo quiere a él. Así que tómense un descanso apropiado y vuelvan preparados para trabajar en serio”.

La ministra de Interior, Amber Rudd, salió en defensa de May y criticó de paso las indiscreciones de sus compañeros de gabinete. “Doy mi total apoyo a la primera ministra y a su visión, como tenemos que hacer todos. Tenemos un trabajo importante y una función honorable que tenemos que seguir cumpliendo”, aseguró.

La cuestión de cómo se debe negociar la salida de Gran Bretaña del bloque europeo está provocando una guerra interna dentro del partido conservador británico, aireada en la prensa a golpe de filtraciones, y el que peor parado salió con estas revelaciones es hasta ahora Philip Hammond, ministro de Economía. Sus ideas económicas, basadas en una salida suave de la UE para proteger a la ciudad de Londres, chocan contra los objetivos de David Davis, ministro para el Brexit; Boris Johnson, ministro de Exteriores, y Liam Fox, ministro de Comercio.

Hammond acusó a estos últimos de tratar de perjudicarle filtrando información que debería, según él, “quedarse en privado”. Este fin de semana el rotativo The Sun publicaba unas declaraciones de Hammond en las que criticaba que los maquinistas de tren “cobraban demasiado” para un trabajo que “es tan sencillo” que podría hacerlo “una mujer”.