Millonarios de Wall Street dictan políticas económicas de Trump

Millonarios de Wall Street dictan políticas económicas de Trump
Por:
  • jaume

En Nueva York

El candidato republicano a la Casa Blanca, Donald Trump, intentó ayer relanzar su campaña, tras semanas de polémicas, con la presentación de un plan económico que promete “la mayor revolución fiscal” desde la presidencia de Ronald Reagan (1981-1989) y abogó por reducir las regulaciones federales. “Hoy comenzamos una gran conversación nacional sobre la renovación económica de Estados Unidos”, afirmó Trump en el inicio de su intervención en el Club Económico de Detroit (Michigan).

Estas medidas económicas vienen aompañadas del anuncio del trabuco económico que lo acompañará de ser el próximo ocupante de la Casa Blanca. El pasado viernes el magnate neoyorkino aseguró que su equipo de asesores financieros estará compuesto por multimillonarios de la industria de las finanzas y del sector inmobiliario.

Entre los nombres más destacados del candidato republicano se encuentran Steven Feinberg, del fondo de inversión Cerberus, y John Paulson, el tiburón de Wall Street que se enriqueció apostando por el derrumbe del mercado hipotecario. También aparece el petrolero Harold Hamm, conocido como el rey del fracking.

“Es un grupo formidable de expertos”, asegura Donald Trump. “El gabinete estará dirigido por Stephen Miller, uno de los primeros que lo apoyó públicamente, junto a Dan Kowolski, que, en calidad de consejero del comité presupuestario de Senado, es una las figuras más influyentes en la elaboración del presupuesto federal. No hay una sola mujer ni representantes del sector tecnológico”, reseña El País.

La lista la completan el banquero Stephen Calk; el industrial Dan Dimicco, que dirigió la siderúrgica Nucor; Howrad Lorber, presidente de la agencia inmobiliaria Douglas Elliman y del fondo Vector Capital; David Malpass, que trabajó para los presidentes Ronald Reagan y George W. Bush; Peter Navarro profesor de economía en la Universidad de California; Steven Roth, de la promotora inmobiliaria Vornado Realty; y Stephen Moore, economista jefe del think tank conservador Heritage Foundation.

Algunas de sus propuestas giran en torno a las habituales del Partido Republicano, pero también lanzó medidas que rompen con las políticas comunes presentadas por los economistas conservadores. En este sentido, la estrategia de Trump es buscar apelar al electorado desencantado con el establishment y no a las grandes fortunas del país. Algo que casa bastante con la elección de Detroit como lugar para celebrar el evento: en su momento fue una de las potencias económicas de EU, ahora una de sus ciudades más pobres. El magnate quiere reducir los impuestos de las empresas de 35 a 15 por ciento.

También desea reducir los siete tipos impositivos a tres: 12, 25 y 33 por ciento como más alto, que, actualmente, está en 40 por ciento. Asimismo, quiere instaurar una moratoria temporal de nuevas regulaciones de agencias. En busca de los electores con cargas familiares, Trump ofrece que los gastos por hijos sean deducibles en la declaración de la renta.

El candidato a la Casa Blanca fue muy crítico no sólo con las propuestas de su rival, Hillary Clinton, si no también con las del actual presidente de EU.

Jan de Vries, experto de la Universidad de California, en Berkeley (UCLA), en una conversación con La Razón, admitió que “son muy pocos los políticos americanos de ambos partidos mayoritarios que ofrecen un programa económico ‘consistente’ durante la campaña electoral”, si bien también ha destacado que “la falta de coherencia de Trump ha sido extrema porque sus promesas han sido extremas”.

Independiente busca candidatura en EU

Un exfuncionario de la CIA se presentó ayer su intención por competir para la presidencia de EU como alternativa para los republicanos antiTrump.Se trata de Evan McMullin, un republicano prácticamente desconocido, que nunca se había presentado antes a unas elecciones.

“Al igual que millones de estadounidenses, yo esperaba que este año nos trajera nominados mejores que, pese a las diferencias partidistas, pudieran ofrecer una visión convincente de un futuro mejor. En vez de ello, nos hemos quedado con dos candidatos que no están preparados para asumir las responsabilidades que buscan”, afirma en una carta con la que oficializó su candidatura.