Washington y Rusia negocian una salida a la crisis en Siria

Washington y Rusia negocian una salida a la crisis en Siria
Por:
  • larazon

Fotos AP

Estados Unidos y Rusia comenzaron ayer a negociar en Ginebra una salida a la crisis siria que evite el ataque con el que amagó Washington. Pese a que aún no se han dado detalles de la primera plática, el secretario de Estado norteamericano, John Kerry, previo a la reunión dijo que la diplomacia es y siempre será el primer recurso de su país y que lograr una solución pacífica es preferible a la acción militar.

Empero Kerry recalcó que el uso de la fuerza será necesario si fracasan los diálogos surgidos tras una declaración en la cual él afirmaba que un ataque contra Bashar el Assad —como castigo por el empleo de armas tóxicas— se podría evitar si entrega su arsenal. A su vez Serguéi Lavrov, ministro de Exterior ruso, indicó que la creación de un sistema para localizar y destruir las armas químicas sirias eliminará cualquier razón para una embestida de EU u otro país a Damasco.

Durante una reunión con su gabinete el presidente Barack Obama expresó que confía en “resultados concretos” de la reunión entre Kerry y su colega ruso.

Subrayó que por ahora su gobierno necesita ocuparse de problemas internos, como la economía o la reforma migratoria, mientras se realizan los diálogos.

Para lograr que la vía diplomática permita descartar la solución militar presentada por EU, el gobierno de Obama llegó a las conversaciones sin condiciones previas, aunque ya había hablado en el Consejo de Seguridad de la ONU para pedir medidas que garanticen que no es una maniobra dilatoria. “Las expectativas son altas, esto no es un juego”, declaró Kerry.

Por su parte Siria trata de mostrarse cooperativo. Ayer el secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki-moon, informó que recibió una carta del presidente El Assad para iniciar el proceso de adhesión a la Convención Internacional sobre Armas Químicas, el primer paso para documentar la cantidad de armamento químico para catalogarlo y luego destruirlo.

Aun cuando estas acciones alientan una salida diplomática, evidencian los obstáculos: la posición de Vladimir Putin, presidente ruso, sobre las acusaciones del ataque que el 21 de agosto mató a mil 400 personas, según Washington. En un artículo de Putin en The New York Times acusa a los rebeldes del uso de gases tóxicos.

El Assad, quien se dijo dispuesto a renunciar a su material químico, pidió que antes EU abandone las amenazas de un ataque y que deje de suministrar asistencia a los rebeldes (a quienes se refiere como terroristas).

Justo ayer se supo que opositores recibieron las primeras armas prometidas en junio por Obama. The Washington Post reveló que la administración de Obama prevé que esta entrega permita a los opositores al régimen fortalecer la ofensiva frente al ejército y alcanzar una mayor unión entre las fuerzas rebeldes.

El rotativo detalla que la entrega inició hace dos semanas, con lo que se puso a la espera tras el anuncio de junio, cuando Barack Obama reveló su decisón de entregar a los rebeldes armamento letal. Además de las armas se incluyen vehículos, equipo de comunicaciones y material médico.

Hoy continúan las reuniones y se espera que el lunes la comisión investigadora que revisó la zona gaseada presente sus resultados. Según un corresponsal de la BBC en Washington, los primeros indicios apuntan a que todavía existen grandes desacuerdos entre Rusia y EU sobre la forma de proceder.

Presupuesto complica operación militar

Aunque temporalmente se detuvo el ataque militar planeado por Estados Unidos para castigar a Bashar el Assad por usar armas químicas, los buques de guerra están listos en el Mar Mediterráneo para embestir. Al mismo tiempo las autoridades del Pentágono insisten en que encontrarán el dinero para financiar la operación si es necesario.

Los masivos recortes presupuestales harán más difícil y más costoso responder rápidamente a conflictos internacionales, dijeron funcionarios de Defensa.

El secretario de Marina, Ray Mabus, advirtió que los recortes presupuestales dificultarán dar al presidente opciones militares creíbles. “A menos que actuemos para solucionar el daño de constantes resoluciones y cortes presupuestales, hay opciones que podrían ser limitadas o no estar disponibles en el futuro”, dijo.

Agregó que ya hay menos buques en el mar, menos pilotos y menos marinos entrenando debido a los recortes que quitarán más de 50 mil millones de dólares del presupuesto de defensa 2014 y 500 mil millones en la próxima década.