Inversionistas extranjeros ven poca atracción minera en México

Inversionistas extranjeros ven poca atracción minera en México
Por:
  • lindsay_h._esquivel

De 2015 a 2016, México cayó 13 posiciones como uno de los países más atractivos para invertir en la industria minera mundial, al pasar de la posición 37 hasta la 50, de un total de 104 provincias dedicadas a esta actividad; en América Latina, el país fue del segundo al quinto sitio, desbancado por Perú, Chile, Argentina y la Guyana francesa.

De acuerdo con el informe anual de la Cámara Nacional de la Industria Minera (Camimex), aún cuando México es un actor relevante en la minería mundial, ha caído 26 puestos en el Índice de Atractivo a la Inversión, desde 2014.

“La imposición de nuevos derechos, la falta de certeza jurídica y la inseguridad han sido los principales elementos disuasivos para invertir en el país”, denunca.

El organismo destacó que las inversiones totales en la industria presentaron un desplome del orden del 20.9 por ciento en el 2016. De acuerdo con la Camimex, el año pasado se captaron sólo 401 millones de dólares para exploración, 90 millones menos que en 2015.

No obstante, el sector minero logró mantener un programa de proyectos previamente autorizados y comprometidos, que resultan en 428 millones de dólares, una reducción de18.9 por ciento con respecto de 2015.

Mientras que la Inversión Extranjera Directa (IED) atrajo 718 millones de dólares, 86.4 por ciento menos con respecto al máximo histórico de 2013 y 66.2 por ciento menos en relación con 2014.

Sin embargo se observó una mejoría en comparación con el año anterior, debido principalmente al repunte de los precios del oro y la plata, lo que propició que muchas empresas elevaran el gasto de capital e inversión sobretodo en la adquisición de maquinaria y equipo, así como en expansión de proyectos.

En ese sentido, el organismo consideró que el país está enfrentando una serie de disyuntivas que lo han hecho menos atractivo para la inversión en exploración minera, por la falta de políticas claras, la rigidez laboral, la insuficiente claridad respecto de las áreas protegidas, la incertidumbre sobre la tenencia de la tierra, la inseguridad y una tributación cada vez más onerosa.

El reporte también señala que si bien la industria minera en México mostró algunos signos de recuperación durante el 2016, principalmente por el aumento en el precio de los metales, la imposición de los nuevos derechos, la imposibilidad de deducir al 100 por ciento los gastos pre operativos de exploración en el mismo año en que se realizan, la caída en la demanda de minerales por parte de China y la desaceleración económica en el país, originaron un comportamiento negativo en los principales indicadores del sector.

De esta forma, la producción minero-metalúrgica reportó un retroceso por cuarto año consecutivo, al pasar de 13 mil 469 millones de dólares en 2015 a 12 mil 543 millones de dólares en 2016, una caída de 6.9 por ciento.

El descenso en el valor de la producción respondió a reducciones en la producción de 17 de los 32 minerales que componen la canasta del sector minero, a la baja de los grupos de minerales siderúrgicos (una reducción de 14.6 por ciento) y al moderado aumento de los minerales industriales no ferrosos con apenas 6.1 por ciento del valor total que registra la producción.