Vacunación en destinos, medida sin gran efecto

La vacunación a personal de la industria turística contra Covid-19 es una buena opción para acelerar la recuperación de esta actividad, que perdió 28.4 por ciento de su Producto Interno Bruto (PIB) por la pandemia en 2020; sin embargo, hace falta diseñar acciones que la complementen para garantizar su eficacia, consideró Leticia Armenta, profesora-investigadora del Tecnológico de Monterrey. 

El pasado 4 de junio, el secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, dio a conocer que las vacunas contra coronavirus Johnson & Johnson serán utilizadas para inmunizar a la población de la frontera norte y los destinos más importantes del país, con el fin de acelerar la recuperación del comercio y el turismo. 

Esencialmente serán Quintana Roo, Baja California Sur, Jalisco, Nayarit, Baja California, Sonora, Chihuahua, Coahuila, Nuevo León y Tamaulipas, entre otras zonas. De acuerdo con información de DataTur, plataforma de datos de la Secretaría de Turismo (Sectur), estas entidades acapararon más de 53 millones 476 mil visitantes totales en 2019. 

Sin embargo, aunque Miguel Torruco, secretario de Turismo, confió en que esta medida detonará la industria turística nacional, la experta del Tec de Monterrey precisó que hacen falta acciones de acompañamiento, como la restricción de llegada de pasajeros o la implementación de un pasaporte de vacunación. 

“La vacunación es importante, porque se puede incidir a nivel local, en los centros turísticos más dinámicos, me parece adecuado, pero no es una medida completa. Se tiene que añadir otro tipo de estrategias, como las restricciones de fronteras, que el pasajero sienta que se les está cuidando y el pasaporte de salud. Todo para evitar otra ola de contagios”, comentó la experta en entrevista con La Razón. 

Una tercera ola de contagios, dijo, es la principal amenaza para la reactivación del sector; en este sentido, conviene recordar que el subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López-Gatell, reconoció que hay un incremento de ocho puntos porcentuales en los contagios de Covid-19 en el país, principalmente en seis entidades federativas que tienen un incremento de casos. 

Entre estos se encuentran Yucatán y Quintana Roo “con un incremento muy sustancial” y que actualmente están en semáforo epidemiológico en color naranja; también resaltó a Baja California Sur, Baja California, que están en naranja y amarillo, respectivamente; y Campeche, Sinaloa y Veracruz. 

“Hemos hecho un llamado para que se reduzcan ciertas actividades donde se congrega la gente, de modo que pueda haber una reducción de contagios. En estas seis entidades federativas vamos a estar trabajando” manifestó el funcionario. 

A pesar del repunte que se registró en entidades turísticas, el Gobierno federal confía en que sea a partir del segundo semestre de este año cuando se comience a notar una recuperación del turismo en niveles previos a la pandemia, gracias a la acelerada vacunación que se observa en Canadá y Estados Unidos, mercados importantes para el país. 

Por el contrario, la industria turística espera que esa recuperación se observe hasta 2024; no obstante, Armenta señaló que ese periodo se puede reducir si se aplican mecanismos adecuados para la llegada de visitantes, ya que, aunque el país se posicionó como uno de los principales destinos para los viajeros durante la pandemia, se debió a que nunca se implementaron medidas en los aeropuertos para controlar el acceso de posibles pasajeros contagiados de Covid-19. 

“Ahora el atractivo de un país es que ofrezca seguridad sanitaria, ésa es una de las claves importantes, no es solamente lo que el país ha hecho en su interior, sino lo que hace para garantizar el bienestar de sus visitantes. Esto tiene que ver con el movimiento de las personas, no sólo locales”, precisó la investigadora. 

A propósito de acelerar el proceso de vacunación en México, la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) reiteró su disposición para la inmunización en los centros de trabajo de por lo menos 20 millones de colaboradores afiliados al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), pues opinó que el proceso de inoculación va muy lento y eso afecta la reactivación económica del país.