Ven más producción, pero alta carga fiscal por anular farmouts

La cancelación de los farmouts o asociaciones de Petróleos Mexicanos (Pemex) con los privados ha traído consigo una serie de posicionamientos a favor y en contra. Por un lado, analistas mencionan que la decisión fue buena debido a que se permitirá que haya producción, antes de lo que se preveía con las asociaciones; en tanto que otras voces aseguran que se incrementará la carga financiera para la empresa productora del estado.

Analistas y expertos entrevistados por La Razón, señalaron que la decisión que dio a conocer la Comisión Nacional de Hidrocarburos (CNH) la semana pasada, permitiría que se cuente con producción lo antes posible, en tanto que si se continuaba con estas licitaciones, la primera producción se observaría hasta en 2021.

“Es bueno para Pemex, debido a que puede tener producción antes de lo que tenía programado. Debido que se esperaba que en octubre se licitara. Esto podría poner la primera producción en 2021. Ahora con esto, se permitirá tener producción con contratos de servicios financiados. Esto ayudaría  tener más flujo al no compartir utilidades con otros. Ahora que le bajarán los derechos e impuestos”, refirió Ramsés Pech, analista energético.

Por su parte, Gonzalo Monroy, director de consultoría de GMEC, refirió que no hay ningún beneficio tras la cancelación, porque las asociaciones permitían que el ganador de la licitación le pagara una parte proporcional a Pemex por las obras ya realizadas; además de que las asociaciones eran en campos que no eran tan grandes, ni tan atractivos para Pemex.

“En pocas palabras tienen una inyección de capital en proyectos que no eran tan viables, ni económicamente tan atractivos para Pemex, le van a dar dinero a Pemex. Ahora en el contexto en el que le bajaron la calificación crediticia a la empresa y que están habiendo recortes para mandar dinero a la empresa, esos eran buenas noticias”, sostuvo.

Explicó que los campos que se licitaban a través de estas asociaciones, no tienen reservas tan importantes y sin mucho potencial, por lo cual no requerían mucho trabajo; ya que apenas llegarían a los cuatro mil barriles, pero que con la ayuda de las empresas, podrían expandirse hasta 10 mil barriles, lo cual permitirñia duplicar la producción, sin que Pemex invirtiera.

“Estos campos no son tan atractivos, porque no tienen reservas tan importantes, tienen considerable potencial que requiere mucho trabajo, no van a llegar a cien mil barriles; uno de los cuatro podría llegar a diez mil barriles, lo que significaría duplicar la producción con el apoyo de otras empresas. Sería beneficio para los mexicanos tener mayor producción y más ventas y sin que les costará el dinero al al estado”, acotó.

Aseveró que con esta decisión se está regresando al modelo que ya se tenía anteriormente, uno monopolio en el que el Estado gasta todo el dinero sin compartir responsabilidades y que de alguna manera se ha demostrado por cuestiones pasadas que no funciona.

Hace poco menos de dos semanas, dos calificadoras de riesgo: Moody´s y Fitch degradaron la calificación y la perspectiva de la empresa productora del Estado, y dentro de las razones, se encontraba una observación de Fitch, en la que aseguraba que Pemex subestimaba las inversiones en su negocio de exploración y producción, lo cual impactaríamos en una caída de las reservas y de extracción.

Aun así, para Monroy, existe una parte de las calificadoras que ya descontaba esta decisión, debido a las decisiones que ha tomado el gobierno federal en materia energética; sin embargo, el hecho de que las firmas de riesgo hayan decidido degradar las notas y la perspectiva, y aún así se haya decidido cancelar totalmente esta acción, terminará por hacer que otras firmas como Standard & Poor´s puedan tomar una decisión parecida.

El Dato: La agencia Moody’s señaló recientemente que esperaría hasta conocer los detalles del plan de negocios de Petróleos Mexicanos para cambiar perspectivas o calificaciones.

IP pide al Gobierno reconsiderar decisión

La Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) exigió al Gobierno federal cumplir con los compromisos pactados con el sector empresarial para impulsar la producción de petróleo, gas y energía eléctrica en México.

El sector patronal demandó reconsiderar la decisión de Petróleos Mexicanos (Pemex) y de la Secretaría de Energía (Sener) de retirar las siete áreas puestas a subasta, principalmente de gas que fueron canceladas.

Asimismo, solicitó a ambas dependencias recapacitar sobre la suspensión de la ronda de licitación para buscar socios a Pemex, conocida como farm-outs, porque sin la participación de empresas privadas será imposible alcanzar la meta de producción de 2.4 millones de barriles diarios prevista por el gobierno federal.

“El gobierno federal debe mandar las señales correctas para propiciar un clima de confianza y certeza jurídica, sobre todo porque la cancelación de los farm outs va en sentido contrario al acuerdo suscrito por el Consejo Coordinador Empresarial y el gobierno federal el pasado 13 de junio”, apuntó la cúpula empresarial dirigida por Gustavo de Hoyos Walther.

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