Viaja seguro en el transporte público

¿Cuándo viajas en el transporte público sabes si estarás protegido ante algún percance? O si tú eres el propietario, ¿cuentas con algún seguro que te permita brindar seguridad a tus pasajeros?

Si tú eres el propietario, pregúntate si cuentas con un seguro, sabes cuál es su alcance, cómo te protege en caso de muerte, qué significan las coberturas con las que cuentas y cuáles son los aspectos que se agudizan en caso de presentarse un siniestro.

Lo mejor es que lo investigues antes de que, ante algún accidente automovilístico, no sepas ni con quién acudir.

Para que las aseguradoras puedan ofrecerte información oportuna sobre los planes de seguro, la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef) dio a conocer la calificación del seguro para el Servicio Público de Transporte de Pasajeros.

Para ello, el organismo realizó un análisis de los contratos, la publicidad y todos los documentos que involucran la contratación de un seguro de daños aplicable a transporte público de pasajeros de 8 aseguradoras, cuyos resultados son los siguientes: 6 con buena calificación, una con calificación regular y otra reprobada.

Un poco de responsabilidad. Si aún no tienes un seguro automotriz, debes considerar la alternativa de contratar alguna póliza que por lo menos tenga la cobertura de responsabilidad civil por daños a terceros.

¿Qué es? Este seguro ampara la responsabilidad civil en que incurra el asegurado o cualquier persona que use el vehículo y que por ello ocasionen daños materiales a terceros en sus bienes o en sus personas.

Asimismo, la póliza con la cobertura de responsabilidad civil por daños a terceros ampara en caso de juicio civil en su contra, los gastos a que fuere obligado (condenado) el asegurado.

De este modo, si llegare a suceder un percance en el que fuera herido o muriese algún viajero o pasajero, la cláusula responsabilidad civil pasajero, establece que la compañía se obliga a indemnizar a los pasajeros por las lesiones corporales; por la pérdida o daño del equipaje; o la muerte por la que fuere responsable el asegurado y/o conductor del vehículo asegurado, mientras éstos se encuentren a bordo del mismo al momento del siniestro con motivo de los servicios de transporte público prestados en el transporte de personas, y concesionado por la autoridad competente.

No debes olvidar que la responsabilidad de la empresa aseguradora comienza en el momento en que el pasajero aborda el vehículo y hasta que descienda de él.