Dentro de la tradición nacional de “sufrir me tocó a mí en esta vida”, Mexicana de Aviación espera con ansia el arribo de sus primeros aviones Embraer 190 E2 a partir de mayo próximo… para luego tener que “bajar” los aviones recién adquiridos para que sus motores Pratt & Whitney GFT sean revisados a fondo, luego de sus primeros 3 mil ciclos como una directriz internacional, dadas las fallas en su tecnología de engranaje que tiene en el mundo a más de 1,500 aviones en revisión a fin de prevenir algún desastre.
Algo financieramente complicado para la inversión de 750 millones de dólares que la aerolínea del Estado mexicano invirtió en adquirir (que no arrendar, ésa es una práctica neoliberal) 20 aviones de ese tipo a la empresa brasileña, que encabeza Bosco da Costa Jr., pues sí, la aerolínea en la que se han invertido 35 mil millones de pesos, que en 2024 perdió más de 1,700 millones, contaba con la pronta puesta en operación de los Embraer a fin de elevar sus ingresos —más allá de las pérdidas que le dejan hoy su menguada flota— y buscar alguna ruta para salir de los números rojos.
La disruptiva tecnología de engranaje de los motores Pratt & Whitney GFT tiene por objetivo ahorros significativos en el consumo de combustibles y reducir el impacto ambiental; pero las fallas en los motores fabricados por la empresa al mando de Shane G. Eddy provoca millones de dólares de pérdidas a las aerolíneas que obtuvieron aviones dotados con tales motores.

Rechazo a un albergue migrante
Así que para Mexicana de Aviación, misma que inició con una alita chueca se avecina una nueva borrasca.
Salud: a ver qué pasa el lunes. Ni en la industria farmacéutica ni en el sector público de salud alguien sabe el procedimiento de la Secretaría de Salud, a cargo de David Kershenobich, para retomar la compra de más del 60% de las claves médicas canceladas por la Secretaría Anticorrupción, de Raquel Buenrostro, y evitar que los tres próximos meses se conviertan en un desolado panorama de desabasto.
Pero tampoco es clara la manera con que el equipo de Buenrostro hará frente a esa crisis, pues de entrada se desconocen cuáles claves médicas fueron canceladas o qué sucederá con aquellos laboratorios y distribuidores ganadores que firmaron contratos amén de contratar insumos, maquinaria y pagado fianzas.
Habrá que ver qué anuncia el Poder Ejecutivo el lunes de Pascua.
Pero la compra era lo sencillo; la complicación —y para la que no hay propuesta conocida— es para la distribución: hoy los almacenes del IMSS-Bienestar que lleva Alejandro Svarch así como los del ISSSTE, que dice dirigir Martí Batres, carecen de capacidad de recibir lo poco que se ha comprado, ya sea por carencia de espacios adecuados o torpezas burocráticas; filas de tráileres climatizados esperan hasta tres días para que los embarques sean recibidos por funcionarios ignorantes y/o corruptos. Dinamarca tropical, pues.
PAN: prohibir narcocorridos en CDMX. No se trata ya solamente de un asunto de libertad de expresión: cada narcocorrido es una afrenta a la memoria de decenas de miles de asesinados, un escupitajo a sus familiares; son un insulto a los integrantes del Ejército, al mando de Ricardo Trevilla, y a la Marina, que dirige Raymundo Morales, que exponen su vida en cada acción contra los narcoterroristas. Una burla malamente musicalizada para todos los que padecemos la inflación por “cobro de piso” a cada agricultor y tendero.
Así que bienvenida la iniciativa de ley presentada por la diputada panista, Laura Álvarez Soto, para exhortar a diversas autoridades federales a prohibir la difusión de narcocorridos y narcoseries, así como aplicar el tipo penal de apología del delito contra quienes producen, interpretan o lucran con contenidos que glorifican al crimen.
La legisladora convoca a la Fiscalía General de la República, a la Secretaría de Seguridad y a la Guardia Nacional, a actuar coordinadamente para aplicar de manera estricta el tipo penal de apología del delito, conforme al artículo 208 del Código Penal Federal que impone de uno a seis años de prisión a quien lo cometa.
La trifulca en Texcoco exhibió hasta dónde cala la narcocultura. Churchill no habría permitido que las fanfarrias nazis sonaran en la BBC ni en Wimbledon.
Coahuila, desalojos y El Moño. Lejos, pero no tanto: es sabido que en Matamoros, Coahuila, se desalojó un predio de más de 100 hectáreas, propiedad de Juan Manuel El Moño Muñoz, adjunto al Ejido Mieleras, donde en el desalojo la policía municipal disparó y mató a un lugareño.
Nota roja… política: la orden de desalojo fue emitida por el juez de primera instancia —tercero de lo civil— Sergio Blanco Dorado, en contra del acta notarial del fedatario Erik Rodríguez Huitrón, quien entregó la propiedad a los ejidatarios.
Ojo: El Moño Muñoz fue detenido en España por cargos de narcotráfico y extraditado a Estados Unidos, donde confesó lavado de dinero. Mera coincidencia tal vez, pero el titular del Poder Judicial de Coahuila, Miguel Mery Ayup, es amigo, vecino y familiar lejano del Moño Muñoz.
Es decir, que el comportamiento de un agente que está siendo investigado por la Fiscalía de Coahuila y actualmente se encuentra en proceso de investigación, fue la excusa para que la campaña mediática derivara en protestas contra el Ayuntamiento de Torreón, que finalmente cumplió con el mandato judicial de desalojo… pero sirvió para ocultar el verdadero origen del conflicto de intereses.
Ahora sí, dispuesta a tres caídas, esta columna con todo y columnista se va de Semana Mayor y amenaza regresar con los conejos pascuales.
