AMLO y equipo: más contradicciones

AMLO y equipo: más contradicciones
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  • francisco_cardenas_cruz

Siguen las contradicciones entre el Presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, y algunos de los que ha propuesto para ocupar cargos en su gobierno: ahora con el designado director general de Fonatur, Rogelio Jiménez Pons, quien el domingo anunció en Mérida el inicio de las obras del Tren Maya, a mediados de diciembre en Palenque, sin previa consulta ciudadana ni estudios ambientales, a lo que quien será su jefe avisó ayer que sí la habrá, el 24 y 25 de este mes, e incluirá la construcción de una refinería en Tabasco y el plan de desarrollo del Istmo de Tehuantepec.

A su estilo, dijo que esta nueva consulta “es para que nuestros opositores, que los respetamos mucho, no tengan ningún pretexto o preocupación” de las principales acciones del próximo gobierno, al tiempo que advirtió que “esta vez no será imparcial” porque defenderá esos proyectos por ser propuestas de campaña, igual que lo fue —aunque no lo mencionó— el anuncio de que cancelaría las obras del Nuevo Aeropuerto Internacional de México.

DE ESTO Y DE AQUELLO…

Después de haber perdido la confianza de no pocos de los integrantes de su propio sector, el empresarial, tras la cancelación del proyecto Texcoco que aseguró que las obras continuarían después de la consulta, Alfonso Romo, designado como Jefe de la Oficina de la Presidencia, se enfrentó a algunos de ellos y no le fue nada bien.

El regiomontano  acudió a inaugurar la reunión anual del Centro Mexicano para la Filantropía, que preside Manuel Arango, en donde luego de reconocer que el gobierno electo ha recibido muchas críticas por algunas decisiones políticas que no han sido compartidas por toda la sociedad, pidió que confíen y colaboren con señalamientos “constructivos”.

Dijo que no quieren un ejercicio del poder alejado de la gente, aunque muchas veces los marcos legales parecen orientados a ello, por lo que está en manos de todos crear los mecanismos para que, con un trabajo conjunto, éste sea posible y de manera eficaz.

La respuesta de Arango fue contundente al señalar que el gobierno entrante debe crear un marco jurídico regulatorio de políticas públicas, para garantizar la seguridad jurídica de todos los ciudadanos y la certidumbre, y que no se debe limitar a los grupos de la sociedad organizada cuando aborde temas “incómodos”, ni debe sobreregulárseles porque eso frena y limita la participación ciudadana.

Alertó el prominente empresario  que “no se debe limitar o penalizar las organizaciones ciudadanas sólo por abordar temas que, aunque legales, incomodan”, al recordar que “en una democracia, lo prohibido lo determina la Constitución, pero evitando una sobreregulación con criterio de control político que cierre espacios, anule la creatividad, frente iniciativas y limite la participación ciudadana”.