Apuntes sobre el silencio. Sofía. Juarroz y Janés

Apuntes sobre el silencio. Sofía. Juarroz y Janés
Por:
  • carlos_olivares_baro

Tengo en mi mesita de noche todos los libros de Roberto Juarroz. Leo sus poemas verticales, siento cierta tranquilidad. Me sumerjo en sus sílabas. Miro el silencio del mundo desde la ventana de la sala de este apartamento donde no cabe un libro más ni un disco más. Escucho el llanto suave de un bebé: mi vecina salió del hospital ayer: parió a una niña que se llama Sofía. Me invita el padre a un tequila. Lo acepto, aunque estuve con fiebre el lunes por una infección intestinal. Sofía está hermosa: los ojos de la madre brillan en medio del silencio.

“Celebrar el silencio. / ¿Hay  otra manera de celebrar la palabra? // Celebrar la soledad. / ¿Hay otra vía para celebrar el amor?”: leo a Juarroz. Pienso en Sofía. “Y aquel que bebe agua / a la lluvia se remite, / al rocío evaporado sobre el pétalo, / a la nieve de perfecta contextura, / al deseo de la nube en mar ardiente, / a la palabra siempre oculta de la fuente”: me susurra como siempre Clara Janés. Sofía acurrucada en el pecho de su madre. Sofía alumbra. Sofía llora: derrama sin pausa sus íntimos presagios. Le han puesto un gorro verde: parece un prodigio sostenida en el instante. Sofía, grandeza posada sobre el infortunio de estos días. “Cuerno de la abundancia del misterio”: Janés.

Estos días. Estos días que se prolongan. Estos días de insomnios. Estos días de abandonos seculares. Estos días de sospechas, de turbaciones, de asechanzas, de cercos. Estos intervalos donde Sofía duerme inocente en una ebriedad de intacto amor. Juarroz: “Abreviar los silencios / como si hubiera entre ellos una espera. / Abreviar las palabras / como si fueran pájaros sin aire. / Abreviar también los pájaros /como si debieran volar en los ojos de un ciego.” Sofía, breviario y también extensión más allá de las sombras de las palabras. Estas horas y la llegada de Sofía.

Y me detengo en el plazo que me regala la estación. Estanco en la escollera: miro la línea del horizonte, extiendo las manos al borde del abismo y “Entre bloques de sueños se filtra como un amanecer la piel despierta de la música” (Juarroz). Me ha dicho la madre de Sofía, que ayer, cuando puse A Love Supreme, de Coltrane, los ojos de la niña estallaron como revienta la llovizna sobre el olvido. Los acordes de Coltrane entrando a la geografía de Sofía. La música  como una fiesta inaugural cayendo en los atajos del asombro intacto de Sofía.

“Los tañidos mojados por la lluvia igualan al sonido con el silencio” / “Mirar es un gesto hacia adentro, / no hacia afuera” / “A veces la música ocupa el primer lugar, / pero otras veces se retira a un segundo plano / y deja correr en nosotros / algo más entrañable que ella misma.” / “Lo visible es un adorno de lo invisible” / “Mirar con los ojos marea”: Juarroz  me ha acompañado en estas marchas por la indecisión de estos días. /// “No hay nada de ficción, / apenas un diálogo mudo, / no hay comunicación / ni comprensión siquiera del dolor, / no hay compasión. / Hay sin embargo un destino tenaz / de abandono impotente / a seguir siendo // en manos de lo desconocido / sino de lo absolutamente incognoscible”: Clara Janés. / Sofía duerme en los filos del crespón. Veo el fulgor de su sueño: un árbol saborea el destello.

https://www.youtube.com/watch?v=GX1_DpZJDIk

Poesía vertical

Autor: Roberto Juarroz

Género: Poesía

Editorial: EMECÉ