Se acerca la renovación de Checo

El fin de semana pasado se disputó un emocionante Grand Prix en el circuito Paul Ricard en Francia, el cual ha sido conocido por brindar carreras poco memorables en los últimos años, sin embargo este fue una notable excepción a la regla.

Las sesiones de práctica indicaban que tendríamos una calificación cerrada entre los principales competidores por el campeonato, Mercedes y Red Bull. Pero fue una sobresaliente vuelta del líder de la tabla de pilotos, Max Verstappen, quien terminó como el más rápido del sábado, con los Mercedes, Hamilton y Bottas, en segundo y tercero respectivamente, mientras que Checo acabó cuarto.

Tras conseguir su primera victoria de la temporada en Bakú, han comenzado a circular rumores más concretos sobre la posible renovación del mexicano con Red Bull. Por lo tanto, una actuación con verdadero impacto en el campeonato era crucial para mantener el ímpetu y confianza que actualmente porta.

Red Bull optó por ejecutar estrategias diferentes con ambos de sus pilotos, usando sus fortalezas para conseguir la victoria de Verstappen y el podio de Checo. El pronóstico estratégico previo al inicio de la carrera para los cuatro líderes era sólo efectuar una parada de pits, cambiando de neumático mediano a duro. Sin embargo, desde etapas tempranas del certamen varios pilotos con este mismo plan expresaron que no pensaban que parar una vez sería viable, incluyendo a los dos hombres de Mercedes.

Se mantuvo tal incertidumbre hasta que Verstappen entró por segunda vez a los pits en la vuelta 32, efectivamente tratando de emular la estrategia de su rival, Lewis Hamilton, en Barcelona. Mientras que Checo mantuvo la misma estrategia de una parada que Mercedes, pero logró mantener los neumáticos para prolongar su único cambio de llantas y eventualmente rebasar a Valtteri Bottas en la recta final de la carrera.

En un circuito donde los dos constructores al frente del campeonato parecían tener un ritmo casi idéntico, fue la diferencia en estrategia que finalmente le otorgó la victoria al equipo austriaco. Un área en la cual Mercedes se ha demostrado muy efectivo en los últimos años, incluso siendo un factor decisivo en sus siete campeonatos consecutivos.

Checo se desempeñó cómo el segundo piloto ideal, presionando a los rivales directos con eficacia mientras ejecuta y entiende su rol a la perfección. Parece que el proceso de adaptación para el mexicano ha concluido, aún así Red Bull es un equipo calculador que usualmente no se precipita en renovaciones de contrato.

No obstante, el constructor austriaco no tiene ningún candidato sobresaliente en esta instancia para un posible reemplazo del jalisciense. Independientemente de eso, Checo se encuentra en tercera posición del campeonato de pilotos, además de jugar un rol decisivo en que su equipo se ubique en el primer puesto. Si continúa con este nivel de resultados, todo apunta a que sigamos teniendo un mexicano en la cima del deporte por unos años más.