Arturo Damm Arnal

Mercado, economía de mercado

PESOS Y CONTRAPESOS

Arturo Damm Arnal
Arturo Damm Arnal
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El mercado es la relación de intercambio entre compradores y vendedores, cuyo resultado es un bien común: bien, porque ambas partes GANAN; común, porque AMBAS partes ganan. Bien común ya que cada una valora más lo que recibe que lo que da a cambio. El mercado es una relación de cooperación entre compradores y vendedores (véase la metáfora de la mano invisible de Adam Smith).

Teniendo la respuesta a la pregunta ¿qué es el mercado?, debemos pasar a ésta otra: ¿qué es la economía de mercado?

La respuesta puede darse, desde el punto de vista de la economía de mercado en el sentido literal del término, o desde la perspectiva de la economía de mercado en el sentido institucional del término, apuntando, desde ya, que para que la economía de mercado, en el sentido literal del término, dé los mejores resultados posibles, en beneficio de los consumidores, debe serlo, también, desde la perspectiva institucional.

En el sentido literal del término son de mercado las economías en las cuales el intercambio (el mercado), es la actividad económica central, de tal manera que se produce para vender y se compra para consumir. Entre la producción (el medio) y el consumo (el fin), está la compra venta, el intercambio, el mercado.

Allí donde la división del trabajo es amplia, profunda y compleja, de tal manera que buena parte de los bienes y servicios que cada uno necesita para satisfacer sus necesidades fueron producidos por alguien más, y por lo tanto son propiedad de alguien más, el mercado, el intercambio, la compra venta, son inevitables. Tú tienes lo que yo necesito, ¿cuánto quieres a cambio? Compra venta, intercambio, mercado.

En el sentido institucional del término (las instituciones son las reglas del juego, desde usos y costumbres –reglas informales– hasta normas jurídicas –reglas formales–), son de mercado las economías en las cuales los derechos de los agentes económicos, tanto por el lado de la producción, oferta y venta, como de la demanda, compra y consumo, están plenamente reconocidos, puntualmente definidos y jurídicamente garantizados, derechos que pueden ser naturales, aquellos con los que la persona es concebida, derechos a la vida, la libertad individual y la propiedad privada, o contractuales, aquellos que la persona adquiere voluntariamente, por así haberlo acordado con alguien más.

Lo repito: para que la economía de mercado, en el sentido literal del término, dé los mejores resultados posibles, en beneficio de los consumidores, debe serlo también en el sentido institucional.

La economía mexicana es de mercado en el sentido literal del término. ¿También lo es en el institucional?

Antes de responder tenemos que ver qué supone la economía de mercado en el sentido institucional del término.

Continuará.