Bibiana Belsasso

¿Virreyes o alcaldes?

BAJO SOSPECHA

Bibiana Belsasso
Bibiana Belsasso
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Antes de que se vayan algunos de los alcaldes que estuvieron al frente de su demarcación en los últimos tres años, o incluso los que repiten, sería ético que aclaren algunas de las cuentas que dejan.

Los lujos excesivos, desde escritorios de 742 mil pesos hasta calienta-toallas, son cosas que no se necesitan, y mucho menos en un gobierno que habla de austeridad.

Empecemos por quien fue alcaldesa de Álvaro Obregón, quien abandonó el cargo para buscar la gubernatura de Campeche y hoy es gobernadora electa, Layda Sansores.

De acuerdo con el Sistema de Portales de Obligaciones de Transparencia (Sipot), en el apartado de “Altas practicadas a bienes muebles”, la alcaldía Álvaro Obregón, encabezada por Layda Sansores, compró en 2019 un escritorio por 742 mil 699 pesos con 65 centavos y un librero por 722 mil pesos.

En la plataforma no se especifica quién realizó las compras, ni para qué serían destinados los artículos comprados.

Por si esos gastos no fueran altos, en esa alcaldía también se adquirió un perchero por un valor de 98 mil pesos, un crucifijo de 20 mil pesos y un calienta-toallas de 26 mil pesos.

A estos gastos habrá que sumar la escalera eléctrica que hasta la fecha no es funcional y que los mismos vecinos llaman “las escaleras de la injusticia”, ubicadas en la colonia El Pirú Ampliación Santa Lucía, que contó con un presupuesto de 190 millones de pesos para 50 metros.

Los vecinos han reportado en redes sociales que pocas veces usan esas escaleras eléctricas, que en realidad no les ayudó a recortar su trayecto, pues esta colonia está en la parte alta de la alcaldía, donde las calles son de bajada.

Hoy, Layda Sansores alista sus maletas, pues desde hace una semana el Instituto Electoral Estatal de Campeche ratificó su triunfo y será la próxima gobernadora de esa entidad tras competir cuatro veces por ese cargo.

Sin embargo, sus lujos no fueron exclusivos en la alcaldía Álvaro Obregón donde, al parecer, invirtieron en muebles finos para equipar la oficina, aunque sólo estuvo poco tiempo de esos tres años para los cuales fue electa.

Cuando estuvo en el Senado fue señalada por reportar gastos excesivos, pues eran movimientos financieros que no estaban relacionados con su labor legislativa. Facturó gastos a nombre de la Cámara alta por 700 mil pesos durante 2016 y 2017.

Ya está en otro cargo

A su paso por la alcaldía de Álvaro Obregón, la hoy gobernadora electa de Campeche, Layda Sansores, fue señalada por realizar gastos superfluos en mobiliario de oficina y artículos decorativos.
A su paso por la alcaldía de Álvaro Obregón, la hoy gobernadora electa de Campeche, Layda Sansores, fue señalada por realizar gastos superfluos en mobiliario de oficina y artículos decorativos.Foto: Especial

A través de una solicitud de información se dio a conocer que en ese periodo, Sansores usó recursos públicos para ir de shoping a tiendas departamentales en la Ciudad de México y Campeche.

Sólo el 30 de noviembre de 2016 gastó 6 mil 610 pesos para 12 kilogramos de bacalao noruego y dos kilos de jamón serrano.

Sus gastos también incluyeron una muñeca Truly Me con valor de 4 mil 940 pesos, así como tintes para cabello, una cafetera por 32 mil 939 pesos y una licuadora por 14 mil 99 pesos.

Mandó a confeccionar, con la diseñadora de modas Carmen Rión, un vestido y una mascada de seda con la cara de los 43 normalistas desaparecidos de Ayotzinapa; también, un saco y un rebozo.

En ese momento su sueldo, de acuerdo con reportes públicos, ascendía a 223 mil pesos brutos, pero de acuerdo a lo adquirido sus gastos excedieron ese monto.

Ella desmintió los informes, respondió que los gastos personales facturados al Senado en 2016 y 2017 no fueron para ella, sino para los trabajadores, así como colaboradores de su equipo.

Pero no fue el único señalamiento. Para 2018, a 45 días de concluir la Legislatura LXIII, pidió su reincorporación como senadora por el PT, de esa forma recibió 177 mil 450 pesos como parte de la llamada dieta y la parte proporcional de aguinaldo. Esto, pese a que en ese año había ganado la elección para encabezar la alcaldía Álvaro Obregón.

Así como Layda, otros alcaldes capitalinos reportaron gastos en 2019 poco acordes a su cargo, según lo publicado en la plataforma Sipot.

Como Víctor Hugo Romo, en Miguel Hidalgo, donde se adquirieron dos mesas de juntas por 151 mil pesos cada una, revisteros valuados en poco más de seis mil pesos y bicicletas por arriba de los 41 mil pesos.

El panorama no cambia en las alcaidías donde hubo reelección, como en Iztacalco, con Armando Quintero, donde reportaron la compra de 20 montables denominados carros eléctricos: cinco de ellos por más de 15 mil pesos y tres por 20 mil pesos.

En Iztapalapa, con Clara Brugada, a cargo de Patricia Aceves Pastrana, no faltaron los anaqueles móviles, pues su reporte de gastos es el único rubro marcado en su gestión de 2019. Valuados entre 7 a 10 mil pesos.

Es verdad que se necesitan hacer gastos en las alcaldías, pero no esos excesos y lujos a cargo del erario público. ¿No estaría mejor invertir esos recursos en seguridad o en pavimentar calles?

En muchas de las alcaldías se ven escritorios viejos y computadoras casi obsoletas. La pregunta es: ¿dónde están, por ejemplo, esos escritorios de 742 mil pesos, las bicicletas de 45 mil pesos, y el calienta-toallas de 26 mil pesos?

Se tienen que transparentar esos gastos, la ciudadanía aporta esos recursos con sus prediales y demás impuestos. Son muchas las carencias que hay en las alcaldías y no se vale utilizar recursos públicos para gastos frívolos.