Gabriel Morales Sod

El futuro de los árabes en Israel

VOCES DE LEVANTE Y OCCIDENTE

Gabriel Morales Sod
Gabriel Morales Sod
Por:

En Israel

Ghaida Rinawie Zoabi, mujer árabe musulmana, originaria y habitante de la ciudad de Nazaret, Israel, fue electa al parlamento israelí en marzo de este año como parte de la lista de Meretz, un partido de izquierda socialista que promueve la cooperación entre las poblaciones árabe y judías en Israel. Las últimas semanas no han sido fáciles para Ghaida quien, con tan sólo unos cuantos días en la política, se convirtió en foco de amenazas por parte de una armada de grupos de derecha que busca a toda costa detener el gobierno del cambio que pondrá fin al mandato de Netanyahu. En esta entrevista, exclusiva para La Razón, Ghaida cuenta sobre los cambios dramáticos en la sociedad y política árabe en Israel, los retos de las mujeres en la política y su pronóstico sobre lo que sucederá en los próximos días.

El domingo a las 16:00 se celebrará la votación para confirmar al nuevo gobierno y grupos de derecha están utilizando todas las herramientas posibles para detener el cambio.

¿Cómo has pasado a nivel personal esta última semana? Tengo la profunda sospecha de que Netanyahu nos quiere llevar a nuevos enfrentamientos, al igual que hace dos semanas, cuando la policía, al mando de su ministro Ohana, decidió encender Jerusalén. Personalmente, esta última semana he estado recibiendo amenazas por teléfono casi diarias diciendo que quemarán mi casa, hemos llegado al punto en que perdimos la sensación de seguridad.

Y sin embargo, a pesar de las amenazas y todos los intentos de Netanyahu, parece ser que habrá un nuevo gobierno conformado por una extraña coalición de islamistas, el centro izquierda y tres partidos de derecha ¿tú estarás cómoda votando para convertir a Neftalí Bennett, líder en favor de los asentamientos, en primer ministro? Yo creo que en el Israel del 2021, un país congelado política, administrativa y económicamente después de cuatro elecciones, tenemos que repensar la forma de hacer política. Imagínate, no se ha aprobado un presupuesto desde el 2018. A pesar de que yo vengo del mundo de la política identitaria, creo que ésta ya no es suficiente. Judíos, árabes, ortodoxos, seculares tenemos que lograr un segundo nivel más allá de estas identidades, sin renunciar a ellas. Los árabes tenemos que volvernos parte de la política israelí y de Israel más allá del día de la votación, y los judíos deben reforzar su identidad israelí más allá de su identidad judía.

Como alguien que ha estado involucrada veinte años en la promoción de la coexistencia entre árabes y judíos, puedo decirte que lo que tenemos hoy no es suficiente. Los enfrentamientos que vimos hace dos semanas representan una profunda brecha entre árabes y judíos. La población árabe no tiene confianza en el Estado, en los medios, en el sistema judicial y sobre todo en la policía ¿cómo podemos continuar así? Las relaciones entre judíos y árabes se tienen que profundizar, ir a comprar verduras a los pueblos árabes el fin de semana es simplemente insuficiente, necesitamos cooperación en todos los niveles, incluso en la política.

Precisamente esto es lo que hemos visto en el último año, los partidos árabes han transformado radicalmente su forma de hacer política, hasta el punto de decidir, por primera vez en la historia, ser parte de la futura coalición…

Sí, el proceso empezó cuando la Lista Conjunta (una unión de todos los partidos árabes) recomendó a Benny Gantz para primer ministro hace año y medio. Incluso Baalad, el partido árabe más radical, decidió apoyar a quien fuera el jefe de las fuerzas armadas, algo sin precedentes, para sacar a Netanyahu. Y en esta ocasión fue Ra’am, un partido islamista, quen decidió, en un paso histórico para un partido árabe, firmar por primera vez un acuerdo de coalición. Para muchos en la sociedad árabe la vieja política de estar siempre en la oposición ya no es suficiente. Hay demasiadas catástrofes, crimen, problemas de desempleo, tenemos que influir desde dentro. La semana pasada hice un llamado a todos los partidos árabes a unirse a nosotros.

Si la nueva coalición logra formarse el domingo, ¿cuál es la primera política que tratarás de avanzar en el parlamento? Como fue el caso de las mujeres, ha llegado la hora de garantizar la representación de hombres y mujeres árabes en el gobierno y las empresas estatales, que hoy, a pesar de que somos el veinte por ciento de la población, es sólo el cinco por ciento. Sólo así podremos consolidar una cooperación verdadera.

Por último, no quería dejar de preguntarte sobre los retos de ser una mujer árabe en la política israelí. Es muy complicado, pero es un reto que yo tomo de manera positiva. Me tomó 10 años tomar la decisión de entrar a la política. Como mujeres pagamos un precio muy alto, especialmente las mujeres que vienen de una sociedad tradicional. Yo tomé esta decisión junto con mi esposo e hijos, y eso es lo que me ha ayudado a resistir los ataques. Siempre tengo en mente que mujeres más jóvenes que yo me ven como un ejemplo y tengo que demostrar que es posible para nosotras hacer política.