Jacqueline L'Hoist Tapia

Qué queremos en derechos humanos para 2021

HABLANDO DE DERECHOS

Jacqueline L'Hoist Tapia
Jacqueline L'Hoist Tapia
Por:

Cada año hacemos nuestra carta de buenos deseos para los derechos humanos, y es que hasta que éstos sean una realidad, las personas podremos vivir en armonía, con trato igualitario, sin discriminación y en libertad. Necesitamos que esto suceda y para eso, el quehacer de los gobiernos es fundamental como garante, es eje central de su responsabilidad y para este 2021 la lista se le torna larga en el mundo: la violencia contra la mujeres y niñas, las personas migrantes y el racismo siguen estando en la primera línea de la defensa.

En México tenemos también nuestra larga lista. Muchos grupos de personas han visto violentados sus derechos, ya sea por una condición de vida específica, por una situación social, cultural, religiosa o por situaciones de marginación y pobreza en donde el género, el origen, el tono de piel, la salud, la edad y el nivel académico, entre otros, hacen que sus derechos se vean trastocados.

¿Entonces qué le estaríamos pidiendo al Estado mexicano este 2021 en materia de derechos humanos?, van cuatro pa’ empezar:

a) Acceso a la justicia, debido proceso e investigaciones judiciales libres de impunidad. Así ninguna vulneración a derechos quedaría sin sanción, tales como crímenes por feminicidios, de odio y a periodistas, abuso sexual, trata de personas, violaciones, desapariciones, daños al medio ambiente, violencia intrafamiliar, etcétera.

b) Leyes y reglamentos para el trato igualitario. Que les otorguemos, apoyo decidido a las niñas, niños y adolescentes. Que las personas privadas de su libertad tengan una verdadera estrategia para la inserción social, que se reconozcan los derechos de las personas migrantes, con discapacidad, LGBTTTIQ+, personas indígenas y personas afro.

c) Garantizar derechos para las libertades, sin anteponer consultas ciudadanas y censuras, como la libertad de expresión, el derecho a decidir de las mujeres, la libre construcción de la personalidad y la movilidad. Sin distinción, sin excepción y sin prejuicios clasistas, moralistas y/o religiosos.

d) Estrategias de seguridad pública que impacten y signifiquen terminar con la militarización en el país. Ya que ésta en sí misma es una violación a derechos humanos; necesitamos justicia restaurativa.

Para esto, en el proceso electoral las y los candidatos deberán ser representantes que garanticen, entre otras cosas, un Estado laico y los derechos humanos. Urge que se nombre a la persona titular de Conapred y de la CEAV, que se revisen las alertas de género, que se apoye presupuestalmente a Conavim, Inmujeres, Sipinna y CNB, que se fortalezca la credibilidad de la CNDH, que el proceso de elección del o la ombudsperson de la CDHCDMX este 2021 sea nuevamente un ejemplo de transparencia, que la Secretaría de Relaciones Exteriores impulse que México obtenga la Secretaría Ejecutiva de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos y que con la participación de México en el grupo de personas expertas de la CEDAW logremos mover al mundo.