Josefina Vázquez Mota

Vacunas por igual al personal de salud

SIN MIEDO

Josefina Vázquez Mota
Josefina Vázquez Mota
Por:

Para Luis Enrique Mercado

Urge que el personal de salud sea vacunado sin importar si es público o privado. En el programa de vacunación anticovid no puede haber distinción ni discriminación.

Hasta noviembre del año pasado, en México habían fallecido mil 800 trabajadores de la salud a causa del Covid-19, más que en cualquier otro país. Ante este tufo de desolación, la única esperanza que queda al personal de salud público y privado es la aplicación de la vacuna.

El artículo cuarto constitucional señala que toda persona tiene derecho a la protección de la salud; eso significa que todas y todos tenemos derecho a ser vacunados obligatoriamente, gratuitamente y sin distinción económica, social, religiosa, género, edad, ante cualquier pandemia que aqueje al país.

Notas periodísticas refieren que el personal sanitario de instituciones privadas no forma parte del programa de vacunación del que sí son beneficiarios los que laboran en el sector público; como si los primeros no estuvieran en riesgo y no atendieran a pacientes con Covid.

De acuerdo con este diario, para febrero se proyecta un alza acelerada de casos de Covid de 163 por ciento, lo que significa que si la tragedia ya era enorme, el riesgo para el personal de salud es aún muy elevado, colocándolo francamente en la línea de la muerte.

Las entidades en donde han fallecido más profesionales de la salud, según Amnistía Internacional, son: Ciudad de México, Puebla, Estado de México y Veracruz, por lo que el personal médico representa, dijo la organización civil, uno de los sectores más vulnerables.

Sumado a que cada día mueren más mexicanos en sus hogares por la saturación de camas en hospitales públicos y privados, porque no hay tanques de oxígeno y porque no hay médicos que los atiendan.

Un doctor del Hospital General La Villa me platicaba que se está colapsando y desbordando la asistencia médica, que hay saturación de cuerpos en la cámara fría y que hasta ahora la vacuna para el personal va lenta o “está en veremos”.

En la atención al Covid no debe haber distinción entre lo público y lo privado, por lo que es inaceptable que no se vele por igual al personal de salud, toda vez que son los que están en la primera línea de combate.

Desde la política es indispensable construir acuerdos de vacunación más amplios con los gobiernos estatales, municipales y con el sector privado, tal y como ocurre en otros países, para evitar un escenario peor y un mayor número de muertes.

“No nos quieren vacunar, pero sí nos envían a pacientes que corresponde al sector público atender. Si nosotros pensáramos como ellos, no atenderíamos a nadie que no fuera paciente de una institución privada, ¿se imaginan cuántas personas morirían?, así nosotros”, escribió en sus redes sociales Alejandro, médico de un hospital privado.