Guerra por CFEMáticos: 4,500 mdp en juego

GENTE DETRÁS DEL DINERO

*Esta columna expresa el punto de vista de su autor, no necesariamente de La Razón.
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El proyecto de licitar la renovación de los casi 1,200 cajeros automáticos para el pago del consumo eléctrico en todo el país ya desató las primeras batallas de una guerra que tiene por eje seis contratos que suman cerca de 4,500 millones de pesos en la Comisión Federal de Electricidad: desde finales de mayo empezaron los tironeos y caballazos entre las áreas clave de la dirección corporativa de administración que encabeza Rubén Cuevas y la poderosa área CFE Subsidiaria Suministradora de Servicios Básicos, a cargo de José Martín Mendoza, para definir los términos específicos de las características técnicas de los equipos que captan el 38% de la cobranza de la paraestatal a cargo de Manuel Bartlett.

Los CFEMáticos fueron los primeros cajeros automáticos habilitados en el país para el pago de servicios por allá de 1992, que progresivamente se instaló en lugares públicos, plazas comerciales y las oficinas de CFE a fin de dar atención las 24 horas a una clientela que actualmente suman 43 millones de personas y empresas. Sin embargo, hoy son equipos veteranos con edades de entre 10 y 20 años que no pudieron renovarse en medio de la pandemia de Covid-19 y que ahora se busca retomar… con empresas que entre otras cosas cumplan con la Certificación CFE L1000-11 que, obviamente, la CFE sólo dispendia esa certificación.

Lo que busca CFE son comprar 5 modelos de cajeros automáticos (Lobby, Loby CR, Auto, STE y STK) que acepten pago en billetes —30 billetes con denominación de hasta mil pesos— monedas así como devolución en papel y metálico; pero además implica la adaptación con sistemas de seguridad, impresión térmica de comprobantes, pantallas táctiles, lector óptico, cámara de seguridad con detección de movimientos, computadora con procesador Intel Core i5 o superior, recicladora de billetes; pero además, ofrecer el interfaz con los sistemas de la CFE, refacciones, reparación y mesa de soporte técnico diario… y por si fuera poco, la obra civil para retirar los viejos equipos y adaptar los espacios a los nuevos cajeros, así como la disposición de los que van de salida. Por eso valen lo que valen los contratos… 

Operadores CFEMáticos. Y por ello también el tamaño de los empujones con los que se buscan despejar el camino para que sólo ganen los “elegidos de la señora”, ablandando los parámetros marcados por CFE Subsidiaria Suministradora de Servicios Básicos. Y precisamente para lograr los “mejores acuerdos” hay dispuesta una bonita mesa en el Hotel St. Regis de la Ciudad de México, donde una amable dama —quien no es funcionaria de la CFE— que es conocida como Laurita “N”, acompañada de otro ”no funcionario” (pero que se mueve como aceituna en martini dentro de la compañía), Elías el chistosito Vásquez, ofrecen facilitar el acceso a ése y a otros concursos usando para ello el nombre de “la señora”. Lo bueno es que Andrés Manuel López Obrador sacó el pañuelo blanco.

Ricardo Salinas, tumbando mitos. Cuatro de las ideas que mantienen el subdesarrollo y autoritarismo recibieron sendos hachazos por parte de Ricardo Salinas Pliego durante el Foro Latinoamericano para la Libertad 2022 organizado por Atlas Network en coordinación con el Centro Ricardo B. Salinas Pliego. Ahí, en conversación con un formato novedoso, en conversación con Antonella Marty, el presidente de Grupo Salinas tundió los mitos 1) el pobre es pobre porque el rico es rico; 2) imperativo redistribuir la riqueza de los que más tienen; 3) necesitamos un populista que nos salve; y 4) la globalización destruye la humanidad.

El tajo central fue cuando sentenció “todos somos desiguales por definición, todos hacemos cosas distintas, la clave está en las buenas ideas y en la libertad para competir. Los pobres quieren tener oportunidades de trabajar, de crecer. La globalización no es más que la gente eligiendo lo que más le conviene. Debe haber más empresarios en el mundo interesados en el tema de la libertad”.

Se puede concluir, pues, que siendo la libertad esencia de la democracia, es el antídoto contra autocracias de todo signo.