Fuero Constitucional: Una deuda pendiente con el pueblo

El pasado martes 9 de febrero la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados realizó la declaratoria de Reforma Constitucional al decreto que reforma los artículos 108 y 111 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos. Esto significa, en otras palabras, que el proceso para reformar la Constitución, previsto en el artículo 135 de la misma, ya se cumplió. Es decir, que tanto la Cámara de Diputados del H. Congreso de la Unión, como el Senado de la República, aprobaron por mayoría de dos terceras partes la iniciativa, y que la mitad más uno de los Congresos Locales, es decir 17 legislaturas, aprobaron la iniciativa de igual forma.

Lo que esta reforma propone es muy simple: que el Presidente de la República pueda ser juzgado como cualquier ciudadano. Así, el Congreso de la Unión y la mayoría de las legislaturas locales en nuestro país, atendemos un llamado enérgico de la ciudadanía que lleva muchos años. Como lo ha dicho el Presidente en reiteradas ocasiones, la corrupción es el peor mal en nuestro querido México y ésta debe eliminarse por completo, barriendo las escaleras de arriba hacia abajo.

Esta Reforma Constitucional responde a una realidad que hemos estado viviendo en nuestra nación desde hace décadas. Lamentablemente los gobiernos anteriores aprovecharon lo más que pudieron para llenar sus bolsillos en detrimento de la ciudadanía. Casos como el de Odebrecht, el de OHL, la Casa Blanca de Peña Nieto, la corrupción derivada de la aprobación de la Reforma Energética, así como del paquete de reformas estructurales, planeadas desde la más alta esfera de corrupción, de un mal llamado “Pacto por México”, entre muchos otros, generaron daños de gran magnitud en nuestro país.

Afortunadamente podemos decir el día de hoy que esos tiempos llegaron a su fin. El compromiso asumido por el Presidente Andrés Manuel López Obrador es muy claro y quienes representamos a la Cuarta Transformación en el Poder Legislativo lo compartimos y lo defendemos. En ese sentido, es nuestra responsabilidad como legisladores actuar en consecuencia y modificar los ordenamientos necesarios para que esto pueda hacerse realidad.

La corrupción es un mal que le ha causado mucho daño a nuestro país a lo largo de la historia. Gracias a ella, hoy vivimos en un país desigual, con problemas de inseguridad, los cuales el mismo gobierno del Presidente López Obrador está resolviendo poco a poco con una estrategia diferente que prioriza la razón sobre la fuerza; en un país que ha sufrido grandes problemas económicos a lo largo de sus años, por culpa de quienes han estado a cargo de las finanzas públicas y que lo único que han hecho es llenar sus bolsillos.

La Cuarta Transformación de la vida pública de México está comprometida con el pueblo y busca resolver este problema de décadas que causaron los partidos políticos tradicionales y el neoliberalismo, mismos que ocasionaron dolor, retroceso económico, desigualdad y hasta muertes. Lo hemos dicho en reiteradas ocasiones, la corrupción mata. Lo vimos en el caso de Javier Duarte en Veracruz con las quimioterapias con agua para los niños con cáncer, por mencionar alguno de los casos más ruines y crueles.

La Reforma Constitucional busca eliminar la corrupción desde lo más alto del gobierno. Como dijimos, las escaleras se barren de arriba abajo y el Presidente López Obrador lo tiene muy claro, es consciente y está tranquilo. Hoy, tenemos un mandatario con una consciencia limpia, que tiene la firme convicción de eliminar los privilegios que han amparado al poder sobre los intereses del pueblo, que han causado impunidad y dolor a México.

Hoy, desde el Congreso de la Unión, respondemos a un llamado del pueblo. Desde el Grupo Parlamentario de MORENA en el Senado de la República seguimos trabajando por y para México. Hoy, con la eliminación del fuero al Presidente de la República, saldamos una deuda pendiente con el pueblo.

@BcsRicardo