El día después de las elecciones

ES LA ESTRATEGIA...

Rodrigo López San Martín
Rodrigo López San Martín
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El lunes 7 de junio habrá claridad. Salvo algunas elecciones muy cerradas que se definirán hasta los conteos distritales del miércoles 9, los resultados de la jornada del domingo 6 de junio darán claridad del panorama político nacional para los próximos 3 años.

Una victoria contundente de Morena pondría la mesa para profundizar el proyecto de la Cuarta Transformación sin freno alguno. Una victoria de la oposición, nivelaría la balanza y obligaría al presidente, Andrés Manuel López Obrador, a hacer política para sacar adelante las prioridades de su agenda.

Pero, ¿qué sería una victoria para Morena y qué para la oposición?

En cuanto a gubernaturas, técnicamente, Morena tiene todo que ganar. Hoy, gobierna sólo uno de los 15 estados en disputa. Así que, definitivamente, crecerá.

Pero quizá no lo que muchos pronosticaban hace unos meses, cuándo hasta en 14 de las 15 entidades salían como favoritos. Hoy, el escenario más probable es que Morena gane entre 7 y 9 gubernaturas. Lo que demostrará, que los candidatos, y las campañas, cuentan.

Pero la prioridad del presidente está en la Cámara de Diputados. Ahí también, el escenario ha cambiado. Hace unos meses, la duda era si alcanzarían o no la mayoría calificada (las dos terceras partes que permiten hacer cambios a la Constitución). Hoy pelean por la mayoría simple.

Igual, si alcanzan los 251 diputados como Morena, será una victoria. Si no lo hacen, pero pueden construir esa mayoría con sus aliados, PT y Verde, será un resultado aceptable. Aunque siempre con el riesgo que implica empoderar a esos partidos parásitos.

Del lado de la oposición, el escenario varía entre partidos. El PAN, tiene altas posibilidades de ganar, sólo o encabezando la alianza opositora, Querétaro, San Luis Potosí, Baja California y Chihuahua, aunque esta última se ha cerrado.

En cuanto a diputados, exceder los 100 legisladores sería un balance positivo, siempre y cuando no se vea superado por su aliado, el PRI.

El PRI apuesta todo a ganar en Campeche y Nuevo León, donde pelea las gubernaturas con Movimiento Ciudadano, y en el caso de Campeche, con Morena. Y en los últimos días, se ha cerrado la elección en Sonora. Si logran estos triunfos y su número de diputados se parece al del PAN, será una jornada muy favorable para ellos, y su dirigente, Alejandro Moreno, será uno de los políticos más fortalecidos hacia el futuro.

Para Movimiento Ciudadano podría ser un gran domingo, si se levantan con el triunfo en Nuevo León y Campeche, y consolidan su fuerza en las elecciones municipales de Jalisco. Continuarían con su narrativa diferenciada hacia 2024.

Los demás, van por mantener el registro y, con eso, alcanzar la mayor cantidad de diputados plurinominales, que los vuelvan el fiel de la balanza los próximos 3 años.

En conclusión, al menos 7 gubernaturas y la mitad de los distritos electorales están en verdadera disputa y con incertidumbre en el resultado. Los últimos días de campaña serán claves, como lo será la operación y movilización de cada partido el día de elección.