José Muñoz Cota: ideólogo cardenista

José Muñoz Cota: ideólogo cardenista
Por:
  • guillermoh-columnista

Uno de los integrantes más jóvenes del grupo que acompañó al General Lázaro Cárdenas en su campaña presidencial fue José Muñoz Cota (1907-1993), destacado orador, profesor y escritor.

A finales de 1934, Muñoz Cota publicó “Panorama de México”. Una opinión sobre la gira del general Lázaro Cárdenas. En este libro Muñoz comenta la gira electoral de Cárdenas y sostiene que su finalidad no fue únicamente encontrarse con sus electores, sino investigar los problemas sociales y económicos del país. Sin embargo, afirma que durante esa gira, el pueblo mexicano renovó, gracias a la figura de Cárdenas, la fe perdida en la Revolución.

 

“En el último capítulo, Muñoz Cota propone la creación de un Comité de Salud Pública, que se encargue de la depuración de los elementos dañinos del PNR. Sostiene que el Comité deberá actuar con prudencia pero con determinación; la depuración, sin embargo, será benéfica para la Revolución”

 

El autor no oculta su marxismo ni su admiración a Lenin, “el más grande estadista de la historia contemporánea”. En los primeros capítulos de su libro, ofrece una interpretación de la historia de México como una lucha del pueblo por su emancipación económica. La creación del Partido Nacional Revolucionario (PNR) en 1929, había sido un paso hacia adelante, puesto que permitió acabar con las divisiones entre los revolucionarios. Sin embargo, aunque el PNR se definía como un partido comprometido con las causas del proletariado, todavía no era un partido de clase. Pensaba Muñoz Cota que la tarea de la revolución era aumentar la producción y repartir la riqueza. Dice: “La Revolución es un proceso permanente. Si tuvo ayer su etapa violenta, hoy debe tener su etapa de edificación económica”. Muñoz Cota examina el Plan Sexenal del PNR y lo pinta como un proyecto de nacionalismo económico, que todavía concede demasiado al capitalismo local. A manera de opinión personal —para no comprometer al presidente— Muñoz Cota sostenía que el Estado revolucionario tenía que atreverse a socializar con todos los medios de producción. Para ello, era indispensable reformar la Constitución, para borrar de ella sus criterios individualistas liberales.

La educación socialista era uno de los frentes de lucha de la nueva etapa de la Revolución. Los maestros serían los soldados del nuevo ejército que ganaría la batalla definitiva. El enemigo no sólo era fanatismo de la Iglesia católica, sino todo el sistema de explotación capitalista. Muñoz Cota cita a Rosa Luxemburgo: “Cuando tenga que hacerse el balance final al capitalismo, el crimen mayor que se encontrará en su cuenta es el de haber pervertido la conciencia de los niños”.

[caption id="attachment_818529" align="aligncenter" width="1184"] Lázaro Cárdenas del Río en una imagen de archivo. José Muñoz Cota lo acompañó en su campaña presidencial.[/caption]

El autor le da mucha importancia a la juventud de Lázaro Cárdenas y al apoyo que recibió de los jóvenes revolucionarios. Dice: “La candidatura del señor general Lázaro Cárdenas sintetiza las aspiraciones y las esperanzas de las nuevas generaciones. Estar por esto con el señor general Cárdenas es adoptar en política una postura juvenil”. Muñoz Cota hace una reseña del Congreso Estudiantil de Morelia de julio de 1933 y reproduce algunos de sus acuerdos, como el siguiente: “La juventud mexicana estudiantil cardenista profesa un claro y definido credo socialista; e inspirada en el pensamiento Marxista, lo elige como táctica de lucha”.

Muñoz Cota ataca el espiritualismo bergsoniano defendido por Antonio Caso. Afirma: “no le vemos un valor social a la filosofía cuando ésta pudiera desarrollarse en el estadio hipotético del else where out of the world (…). Más claro: no nos interesa la filosofía que se pueda elaborar para conducta de los marcianos “…” sin aquella que parte de nuestra calidad de hombres en relación con el mundo exterior y con los demás hombres”. El autor cita el célebre ensayo de José Ortega y Gasset Misión de la Universidad, en el que afirmaba que la Universidad debía estar a la altura de sus tiempos. Muñoz Cota sostiene que es paradójico que sea Ortega el autor favorito de quienes se oponían a que la Universidad estuviera en consonancia con la clase social, que ya mandaba en México: el proletariado.

 

“Muñoz Cota examina el Plan Sexenal del PNR y lo pinta como un proyecto de nacionalismo económico que todavía concede demasiado al capitalismo local; sostenía que el Estado revolucionario tenía que atreverse a socializar con todos los medios de producción”

 

En el último capítulo, Muñoz Cota propone la creación de un Comité de Salud Pública, que se encargue de la depuración de los elementos dañinos del PNR. Sostiene que el Comité deberá actuar con prudencia pero con determinación, y señala el riesgo de que las acciones del Comité provoquen el mimetismo de falsos revolucionarios. La depuración, sin embargo, aunque no sea completa, será benéfica para la Revolución. Si bien no los menciona por su nombre, es evidente que Muñoz Cota tenía en la mira a Plutarco Elías Calles y su grupo.