La polémica de Roma en España

La polémica de Roma en España
Por:
  • hector_badillo

Las redes sociales fueron el escenario donde se encendió el debate a partir de que se hiciera público que Netflix, la plataforma digital de contenidos audiovisuales, decidió subtitular en "español de España" la reconocida película del director mexicano Alfonso Cuarón: Roma, donde se utiliza el castellano como lengua principal acompañado de algunos diálogos en mixteco.

¿Se desprecia el español que se habla en México? ¿Se desvaloriza el idioma que se habla en otras partes fuera de España? ¿Se insinúa que los españoles no son capaces de entender el contexto de las palabras? O es un simple medio para ayudar a la comprensión de la película. Estas fueron algunas premisas que se debatieron en redes sociales hasta llegar a los medios masivos de comunicación, donde la polémica sobre esa decisión de la empresa estadounidense Netflix explotó y para evitar más controversia fue borrada la opción dentro de la plataforma digital. para escoger subtítulos en español ibérico.

En España hubo opiniones encontradas, pues algunos cines de Madrid y Barcelona muestran la película con los subtítulos mencionados. Hubo gente que se sintió ofendida por el uso de estos subtítulos y gente que apreciaba su aparición para ayudar a la comprensión de la película. Independientemente de las opiniones, este hecho no tiene precedentes, al menos cuando los diálogos que se utilizan en las películas no son de uso coloquial. Cabe mencionar que anteriormente las producciones mexicanas como el “Chavo del ocho” o las películas de Cantinflas que se transmitían en España mantenían el idioma original y algunas películas de Diseny como La Cenicienta se transmitieron con el doblaje que se hacía en suelo mexicano.

Ciertamente Roma no tiene un lenguaje coloquial y aunque sí hay palabras muy mexicanas, el porcentaje de éstas es muy bajo. A mi parecer los subtítulos sobran en cualquier película, estorban, incomodan, distraen. Para los que amamos el cine sabemos que es mejor ver y escuchar la películas en idioma original y sin distracciones. La realidad es que si utilizamos los subtítulos, a pesar de que estemos entendiendo perfectamente el diálogo, los vamos siguiendo de manera mecánica y perdemos tiempo de visualización, tiempo valioso en una obra magistral como lo es Roma, de Alfonso Cuarón.

El mismo director de Roma declaró al diario El País que esta acción fue "parroquial, ignorante y ofensivo para los propios españoles". Más que tomarlo como una ofensa, parece ser algo totalmente innecesario, porque el contexto es suficiente para comprender el diálogo, y al leer los subtítulos se pierde tiempo valioso de una película que necesita de total atención para adentrarse en el mundo de Cuarón ñ, que pinta el México de los años 70 y las diferencias de la vida en un mismo país. Recordemos que el español se alimenta de la maravillosa diversidad de idiomas y acentos que existen en el mundo.