Paridad judicial

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Por:
  • mauricioi-columnista

El pasado 3 de julio el Consejo de la Judicatura Federal publicó la convocatoria de un concurso de oposición para cubrir 25 vacantes en juzgados de distrito. La importancia de estos órganos jurisdiccionales radica en ser los encargados de determinar la procedencia de los amparos indirectos, es decir, los interpuestos contra actos de autoridad que no son sentencias.

La experiencia reciente respecto a los concursos de oposición para ser juez de distrito es preocupante. En 2013, por ejemplo, algunos participantes impugnaron que preguntas respondidas correctamente se calificaran como erróneas. Algo similar ocurrió en 2015, cuando los errores del director del Instituto de la Judicatura tuvieron como consecuencia que se  eliminara una tercera parte de las preguntas del examen. Recordemos, más recientemente, que en 2018 un concurso fue cancelado debido a que se comprobó que hubo venta de las preguntas de la evaluación.

El concurso actual consta de dos etapas. La primera consiste en la solución de un cuestionario elaborado por un comité técnico, auxiliado por el Ceneval, integrado por un consejero de la Judicatura, un juez de distrito y un miembro del comité académico del Instituto. Esta fase se llevará a cabo el 26 de agosto en 10 sedes ubicadas en todo el país. Quienes participen contarán con cinco horas para responderlo y únicamente pasarán a la segunda etapa quienes obtengan las 50 calificaciones más altas.

La segunda etapa se dividirá en dos fases: la resolución de un caso práctico y la presentación de un examen oral. La elaboración del caso práctico se realizará el 14 de octubre en la sede del Instituto en la Ciudad de México. Quien participe deberá realizar un proyecto de sentencia de un juicio de amparo indirecto y contará hasta seis horas para concluirlo. Los proyectos serán evaluados por el comité técnico que los calificará sin conocer la identidad de quienes los elaboraron.

El examen oral se llevará a cabo entre el 24 y el 30 de octubre en la Sede del Consejo en la Ciudad de México. Quien participe expondrá ante los integrantes de un jurado, hasta por 15 minutos, un tema relacionado con un temario previamente establecido. Después de exponer, recibirá preguntas y repreguntas del jurado integrado de manera similar al comité técnico. Los parámetros de la evaluación final prevén una calificación de hasta 45 puntos para el caso práctico, otro tanto en la exposición oral y un máximo de 10 derivado de la carrera judicial. Para cubrir la vacante se necesitará haber obtenido al menos 36 puntos en los primeros dos criterios y un mínimo global de 85 puntos.

La singularidad de este concurso radica en ser el primero dirigido únicamente a mujeres. Asumiéndolo como una acción afirmativa, orientada a promover que un mayor número de ellas ocupe los puestos más altos, el certamen es un primer paso de un largo camino para que la judicatura federal deje de ser una sucursal del Club de Tobi que prohibía la entrada a las mujeres.