Secretaría de Salud DF suspende 53 farmacias por medicamentos caducos

Foto: Notimex

La Secretaría de Salud (Sedesa) de la Ciudad de México, a través de la Agencia de Protección Sanitaria (APS), ha suspendido el último año 53 farmacias con consultorios médicos que no contaban con permiso, incumplían con medidas de sanidad y vendían medicamentos con caducidad vencida, con lo que evitó riesgos a la salud de los consumidores y los pacientes.

El 10 por ciento no contaba con el aviso de funcionamiento, el cual es otorgado por la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris), y el 12 por ciento se encontraba comunicado con otra razón social, giro o casa habitación, principales motivos por lo que fueron colocados sellos de suspensión de actividades en las 53 farmacias.

Durante este mismo periodo, la APS ha realizado 104 visitas de fomento sanitario en farmacias con consultorios contiguos, a fin de recordar a los prestadores de estos servicios los requisitos sanitarios con los que deben cumplir para que sus productos y servicios no presenten un riesgo a la salud de la población.

Otras 397 visitas correspondieron a acciones de verificación para constatar las condiciones sanitarias, documentación y el cumplimiento de los puntos de evaluación de la norma de salud.

Durante esta semana a través de operativos de fomento sanitario, verificadores de la APS acudieron a una farmacia con consultorio ubicada en la colonia Pradera, en la delegación Gustavo A. Madero, en la cual se colocaron sellos de suspensión de actividades, aplicaron medidas de aseguramiento de productos caducos, así como apercibimientos a los dueños para subsanar irregularidades y cumplir con la normatividad sanitaria.

Entre las anomalías que detectaron es que el consultorio médico brindaba servicio con el aviso de funcionamiento de la farmacia, cuando cada giro debe contar con su propio permiso, aunque pertenezcan al mismo propietario; los negocios estaban intercomunicados y usaban la misma accesoria; además, vendían medicamentos con caducidad vencida, por lo que aseguraron tres kilogramos de medicamentos caducos y 800 gramos dentro del consultorio.

Durante los recorridos, los verificadores sanitarios recuerdan a los dueños o encargados que los consultorios debe estar separados de las farmacias, contar con aviso de funcionamiento; que la persona que esté dando la atención médica sea un médico titulado; llenar expedientes clínicos, tener áreas de exploración y de entrevistas separadas por alguna barrera física, y contar con lava manos en el área de exploración para evitar la contaminación cruzada.

En las farmacias se observa también que tengan medicamentos a la venta dentro de la caducidad; contar con licencia sanitaria y libro de registro para la venta de medicamentos controlado, y si son farmacias de medicamentos genéricos que no comercialicen psicotrópicos.