El Oklahoma City Thunder se puso a una victoria del campeonato de la NBA, luego de vencer en el quinto juego de las finales a los Indiana Pacers por marcador de 120-109, poniendo a soñar a la afición con su primer título al poner la balanza 3-2.
Con 40 puntos de Jalen Williams y 31 de Shai Gilgeous-Alexander, OKC se impuso en un juego físico y que estaba parejo hasta el último cuarto, cuando los vencedores se despegaron en la pizarra.
El Thunder salió con una actitud demoledora, que quedó de manifiesto al medio tiempo, al cual se fueron con ventaja de 59-45, ganando los dos primeros parciales gracias a una ofensiva dinámica, veloz y afectiva en la pintura, así como los tiros de campo.
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La movilidad de OKC ha sido fundamental en toda la serie y en el quinto juego de la serie no fue la excepción, además que en la primera mitad del duelo la figura de Jalen Williams destacó sobre el resto con 16 puntos y 6-12 en tiros de campo.
Aunque estaba en la duela, Tyrese Haliburton no estaba en la misma forma en la que se había visto en duelos pasados, pues en la mitad del choque tenía 0 puntos, 0 de 5 en tiros de campo, un rebote y dos asistencias, números bajos para la super estrella de Indiana.
Posiblemente el bajón en el nivel de Haliburton se deba a una lesión que se ha mantenido en secreto, pero que habría quedado al descubierto cuando abandonó la cancha brevemente en el quinto duelo de la serie.
Con 10:04 minutos jugados en el primer cuarto, Tyrese Haliburton fue al vestuario, del cual salió con un vendaje en la pierna derecha. Pudo jugar los últimos 8:27 de la primera mitad y empezó la segunda parte con normalidad.
Esta lesión, de la cual no se conoce nada, ha sido una constante molestia todas las Finales de la NBA, pues desde se le ha visto mermado, incluso cojeando en el segundo juego.
Estas Finales de la NBA no han tenido un claro dominador. Han alternado victorias y derrotas. El juego 1 lo ganó Indiana y el segundo de la serie fue para Oklahoma City, para el tercero y cuartos repitieron la combinación y empatando la llave 2-2.
Si la estadística se impone, el triunfador de este quinto juego prácticamente aseguró ser el ganador del Trofeo Larry O’Brien, pues así ha pasado en 23 de las 31 ocasiones anteriores en que las Finales de la NBA han estado empatadas a dos juegos cada uno.
El Juego 6 de estas finales se realizará en Indiana el jueves, en donde se puede consagrar al monarca de la mejor liga de basquetbol del mundo, pero de ser necesario el Juego 7 y definitivo se llevará acabo de regreso en Oklahoma City.
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