Corrupción e ingobernabilidad pegan a calidad crediticia

Debo no niego, pago no tengo…Uno de los principales dolores de cabeza para mantener la estabilidad económica es el manejo de la deuda.

Hace un par de años, los desbalances derivados de la ineficiencia del gasto y el incremento de los compromisos, como las pensiones, derivó en un cambio de perspectiva sobre la nota crediticia de México; un tirón de orejas sobre el rumbo fiscal.

De 2005 a 2012, la relación deuda-PIB pasó de 28% al 37.2% y en 2016 alcanzó el máximo de 48% de producto.

Amarga medicina…En ese contexto, el gobierno debió implementar una serie de medidas estratégicas para reducir el dispendio.

Puntualmente se eliminaron proyectos como el Tren Transpeninsular, el México- Querétaro y la presa de Sinaloa.

Asimismo, volvieron al tintero programas sociales como el programa de apoyo al desempleo y un verdadero esquema de salud universal.

De 2012 a 2018, el presupuesto en salud pasó de 580 mil millones de pesos a 569 mil millones; una baja de 1.9%.

Como quiera, el amargo correctivo frenó la velocidad de la deuda, la cual retrocedió marginalmente, y para este año podría cerrar en 46% del PIB, 34.5% sin contar la deuda de Pemex.

Ante el cambio de señal, las calificadoras apagaron la alarma y regresaron la perspectiva a estable, pero la bala pasó cerca…

Desbalances… En ese sentido, una de las principales preocupaciones, de cara a los próximos 6 años sería un retorno del gasto.

Hasta ahora el gobierno de Andrés Manuel López Obrador, destaca que no ampliará el déficit fiscal. No obstante, tampoco se proyecta un retroceso palpable de los adeudos.

Jaime Reusche, especialista de la calificadora Moody’s destaca que si bien el nivel actual está en línea con la media de los soberanos con nota A3, que es de 45% del PIB, la realidad es que en el país persisten otras debilidades intangibles que ponen en riesgo el equilibrio fiscal, por lo que una deuda menor sería deseable.

Al detalle, los indicadores de gobernabilidad en el país no son los más halagüeños. En lo que hace a estabilidad política se tiene una calificación de 20 puntos por debajo de los 70 que tienen el grueso de los países con la misma nota como Islandia, Malasia, Malta y Perú.

De igual manera, en estado de derecho no se alcanzan los 20 puntos, mientras que el promedio es de 80 puntos.

En esa misma tesitura, en lo que es el control de la corrupción se tienen cerca de 10 puntos, nivel a años luz de los 80 puntos de nuestros pares con nivel A3.  Como ve, clara vulnerabilidad…

Patético panorama laboral para Millennials

Futuro sombrío… En el orbe, los Millennials son el grupo de trabajadores más vulnerable. Se estima que en promedio, ese grupo nacido entre 1981 y 1995 tiene una capacidad de compra 4% por debajo del que tenían sus padres a su misma edad.

De igual manera en el país, de acuerdo con datos de la Fundación Reinventando México, el 52% de esos jóvenes sobrevive con un salario por debajo de la línea de bienestar y muchos de ellos no cuentan con ningún tipo de seguridad social.

Puntualmente, 11 % de ellos no supera los 2 mil 400 pesos de salario mensual y sólo 4.4% tiene un sueldo por arriba de los 12 mil pesos. Oh-oh…