Hacen su música con una lavadora
La agrupación española Cabo San Roque (Cataluña), que es dueña de un estilo original y de instrumentación, como una lavadora de ropa, se presentará mañana y el domingo en la Casa del Lago Juan José Arreola.
Una lavadora de ropa puede tener posibilidades de uso distintas a las de su función fundamental, por ejemplo en lugar de lavar, podría empapar de sudor y energía decenas de camisetas de los jóvenes que asistan a esas presentaciones.
La lavadora de la familia Caba, que después de tantos años hacía más estruendo que colada (lavado de ropa sucia de una casa), es la protagonista de este concierto.
Esta vieja lavadora tiene la particularidad de interpretar las piezas de ropa que lava. Así, en función del tejido, del color, de las gotas de sudor y la suciedad de la ropa, aparece una música u otra.
Todo un conjunto de parámetros que la lavadora interpreta y transforma en movimiento de engranajes, cilindros y martillos de piano que actúan sobre diferentes instrumentos.
Lo que resulta de este encuentro son temas instrumentales construidos sobre secuencias mecánicas y repetitivas, casi obsesivas, en que la intervención de los músicos transforma la repetición -loops- de la máquina en escenarios musicales y visuales dispersos.
Es la segunda ocasión que Cabo San Roque se presenta en el recinto universitario, pero esta vez mostrarán su material Música a máquina: Concierto para autómatas y orquesta dirigidos por una lavadora.
Integrado por Roger Aixut, Ramón Garriga, Josep Seguí, Alberto Mezquiriz y Laia Torrents, Cabo San Roque surgió en 2001 como orquesta de salita y comedor.
Seis años más tarde, luego de pasar por el cuarto piso de la calle Elisabets, el tercero de la calle Ciutat y por el agujero de Sant Llatzer en el corazón del Raval, cabo San Roque dispone por primera vez de un espacio de trabajo que le permite afrontar y hacer realidad nuevos retos y proyectos imposibles hasta ese momento. Se inaugura la Frana Xica como espacio abierto a la inspiración y el sudor.
La trayectoria del grupo nunca ha sido una línea recta y de hecho, cada vez hay más desdoblamientos y líneas bífidas, que cohabitan también, con dobles y hasta triples personalidades.
Con información de agencias
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