Hong Kong: se abre primera grieta entre manifestantes
El movimiento disidente que exige libertad de Hong Kong respecto a Pekín se encuentra en una encrucijada luego que los manifestantes ocuparon el aeropuerto de Hong Kong y retuvieron y golpearon a dos hombres de la China continental, a quienes acusaban de ser infiltrados.
Legisladores prodemocracia y algunos de los alzados han cuestionado si el movimiento quizás se está excediendo. Lo cierto es que empiezan a surgir las grietas en el movimiento a pesar de una asombrosa unidad mostrada desde que iniciaron las movilizaciones en junio.
El debate ha causado dudas entre manifestantes, aunque éstos siguen pensando que sus tácticas más tajantes son necesarias para lograr las metas fijadas.
Inicialmente lo que querían era que se derogue una ley que permitiría a las autoridades de Hong Kong extraditar a presos al sistema judicial de la China continental. Pero rápidamente se transformó en un movimiento a favor de elecciones democráticas, de la renuncia de la administradora local, Carrie Lam, y de una investigación sobre si la policía se estaba excediendo al reprimir los disturbios.
Los manifestantes en las barricadas han lanzando ladrillos contra la policía, han saqueado la sede de la Legislatura, han bloqueado un túnel bajo el puerto de Hong Kong y han lanzado huevos contra el cuartel policial.
El Dato: Una encuesta sugiere que 70 por ciento de empresarios de EU en el sur de China ya consideran reubicar sus negocios fuera del país.
Para Lam, se trata de “elementos violentos” que tratan de destruir la economía de la ciudad. El Partido Comunista de China, que ejerce el poder de manera hegemónica, asegura que las protestas “son el primer síntoma del terrorismo”. Pero para los inconformes más comprometidos, no hay marcha atrás.
Algunos quejosos en resistencia se disculparon por la reacción excesiva, otros culparon del hecho a provocadores.
Ante la presión para poner fin a meses de protestas antigubernamentales, la líder de Hong Kong se comprometió a abrir un diálogo, en un esfuerzo por reducir las diferencias.
Sin embargo, la jefa ejecutiva no ofreció concesiones al movimiento de protesta, y un grupo que organiza marchas multitudinarias rechazó el plan para establecer de inmediato una “plataforma de comunicación”, poniendo de manifiesto el desafío que supone resolver la crisis política en la ciudad.
¿Qué si interviene Pekín?
Consecuencias de una posible injerencia militar.
El estatus de Hong Kong como centrofinanciero y puerto internacional podría resultar dañado.
China se enfrentará a un rechazo internacional inevitable
Los gobiernos tendrán que revisar sus lazos con China y la economía sufrirá un gran revés.
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