Empleos e ingresos (2/2)

PESOS Y CONTRAPESOS

Arturo Damm Arnal*Esta columna expresa el punto de vista de su autor, no necesariamente de La Razón.
Arturo Damm Arnal
*Esta columna expresa el punto de vista de su autor, no necesariamente de La Razón.
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Ya tenemos, del INEGI, los Indicadores de Ocupación y Empleo para marzo, con lo cual ya tenemos la información, de empleos e ingresos, para el primer trimestre. En el pasado Pesos y Contrapesos analicé los empleos. Ahora toca el turno a los ingresos, uno de los talones de Aquiles de la economía mexicana.

Comienzo comparando con el mismo trimestre del año anterior, el primero de 2023. En enero el 69.20% de la población ocupada ganó hasta dos salarios mínimos, en febrero el 73.17%, en marzo el 73.00% (lo correcto es que el porcentaje vaya bajando). Promedio: 71.79%. En enero pasado el 70.68% de la población ocupada ganó hasta dos salarios mínimos (más que un año antes, 69.20%), en febrero el 71.49% (menos que un año antes, 73.17%), en marzo el 69.94% (menos que un año antes, 73.00%). Promedio: 70.70% (menos que un año antes, 71.79%).

Continúo comparando con el trimestre anterior, el cuarto de 2023. En octubre el 67.69% de la población ocupada ganó hasta dos salarios mínimos, en noviembre el 68.07%, en diciembre el 69.49%%. Promedio: 68.42%. En enero pasado el 70.68% de la población ocupada ganó hasta dos salarios mínimos (más que tres meses antes, octubre, 67.69%), en febrero el 71.49% (más que tres meses antes, noviembre, 68.07%), en marzo el 69.94% (más que tres meses antes, diciembre, 69.49%). Promedio: 70.70% (más que un trimestre antes, 68.42%).

Lo preocupante es que, redondeando cifras, más o menos dos terceras partes de la población ocupada genera hasta dos salarios mínimos de ingreso, mismos que, pese a los aumentos que se le han otorgado al salario mínimo en esta administración (16.21% en 2019, 20.00% en 2020, 15.00% en 2021, 22.00% en 2022, 20.00% en 2023 y otro 20.00% en 2024, 18.87% en promedio anual, 181.72% en total), sigue siendo un ingreso insuficiente, sobre todo si se pretende algo más que la satisfacción de las necesidades básicas, como lo sigue siendo, por poner un ejemplo, el salario base de cotización promedio de los trabajadores afiliados al IMSS, que en febrero fue de $572.2 diarios, 2.3 veces el salario mínimo vigente, $248.93 al día.

Según los Indicadores de Ocupación y Empleo, del INEGI, la tasa de desempleo, en marzo, se ubicó en su mínimo histórico, 2.3% de la población económicamente activa (integrada por los mayores de 15 años que buscan trabajo: si lo encuentran se vuelven población ocupada; si no lo encuentran, y siguen buscando, siguen siendo población desocupada), lo cual es un buena noticia. Sin embargo, el porcentaje de población ocupada que en marzo trabajó encontrándose en alguna condición de informalidad (o porque trabajó en una empresa informal o porque trabajó de manera informal en una empresa formal), fue 54.3, a lo cual hay que sumarle que, también en marzo, el 69.94% de la población ocupada generó hasta dos salarios mínimo de ingreso, hasta $497.86 diarios, lo cual, si se aspira a algo más que la satisfacción de las necesidades básicas, y dicha aspiración es legítima y debe fomentarse, resulta insuficiente.

Otro dato. En marzo el 34.3% de la población ocupada se encontró en condición crítica de ocupación, trabajando menos de 35 horas semanales, o trabajando más de 35 con ingreso menor al salario mínimo, o trabajando más de 48 con ingreso de hasta dos salarios mínimos. En marzo del año pasado fue el 32.6%.