La Ciudad de México, y en general el país, ya se encuentran en una nueva ola de contagios de Covid-19 desde hace al menos tres semanas, con Ómicron como la variante predominante, alertó la jefa del Laboratorio de Genética Molecular de la UNAM, Laurie Ann Ximénez-Fyvie.
En entrevista con La Razón, la especialista en microorganismos explicó que la situación que se vive es “muy grave”, ya que los contagios en los últimos días se han incrementado en 140 por ciento, por lo que destacó que es un “sinsentido” que las autoridades nieguen que se trate de otra ola.
“Las bases internacionales están marcando a Ómicron en un 57 por ciento de circulación en México; quiere decir que el 50 por ciento del virus que circula es esa variante; entonces, nada más hay que voltear a ver lo que está pasando en el resto del mundo. Los repuntes están escalando tan exponencialmente, que van en vertical”, advirtió.
No se puede tapar el sol con un dedo; México está en su cuarto repunte, que pinta para ser muy grave, por la velocidad del avance en los contagiosLaurie Ann Ximénez-Fyvie, Doctora en Ciencias Médicas, Harvard
Ximénez-Fyvie subrayó que hay entidades del país, como Baja California Sur y Quintana Roo, que ya rebasaron los picos de contagios más altos de las olas anteriores, por lo que en este repunte su cantidad de contagios es la más alta de toda la pandemia, y alertó que la Ciudad de México va en ese mismo ritmo de crecimiento, al igual que otras entidades.
“No se puede tapar el sol con un dedo; México está en su cuarto repunte, es un repunte que pinta para ser muy grave, por la velocidad del avance en los contagios. Incluso en un país donde se hacen tan pocas pruebas, se puede detectar que esto va creciendo a una velocidad no vista antes, en ninguno de los repuntes previos. No hay lugar a dudas: estamos en la cuarta ola y, para ser muy claros: estos datos, si los tengo yo, los tiene, y más detallados, la Secretaría de Salud”, indicó.
En este sentido, la experta dio a conocer que la tercera ola concluyó el día 12 de diciembre del 2021, en la semana epidemiológica número 50, que fue donde se presentó el menor número de contagios; sin embargo, a partir de la semana epidemiológica número 51, que se inició el 19 de diciembre pasado, se comenzó a ver el inicio de la nueva ola.
“Desde esa semana ya habíamos empezado a tener un repunte y es un repunte irreversible; de ahí subieron los contagios, de alrededor de 14 mil a cerca de 18 mil, pero la semana epidemiológica siguiente, el brinco fuente hasta de 44 mil contagios (en el país)”, subrayó, e indicó que “decir que no está pasando nada” es “criminal y contraproducente” al esfuerzo por salvar vidas, ya que la población debería saber el riesgo al que se enfrenta para protegerse del virus.
En la Ciudad de México también se ha observado el mismo incremento en la cantidad de hospitalizaciones por el virus desde la semana epidemiológica 50 —que transcurrió del 19 al 25 de diciembre—, tal como lo indicó Ximénez-Fyvie.
Cuando se dice que no sirve vigilar fronteras, usar cubrebocas, lo que pasa es esto: millones de contagios, miles de muertes, y cuando se empiecen a llenar los hospitales, no habrá más remedio que cerrarLaurie Ann Ximénez-Fyvie, Doctora en Ciencias Médicas, Harvard
De acuerdo con la información pública del Gobierno capitalino, en esa semana la cifra más alta de hospitalizaciones reportadas fue el 30 de diciembre, con 309 pacientes ese día; para la semana siguiente, del 26 de diciembre al 1 de enero, la cifra más alta fue de 332 personas hospitalizadas, el 28 de diciembre; mientras que para la semana en curso se ha visto un incremento, con 447 pacientes internados en el reporte de ayer.
En el caso de los contagios, los números son similares: este martes, la cifra de nuevos reportados fue de cuatro mil 447 en un día, cuando el 23 de diciembre, antes de Navidad, se documentaron 751 en 24 horas.
Laurie Ann Ximénez-Fyvie resaltó que la estrategia de control de la pandemia está basada en “un montón de falsas dicotomías”, pues la alternativa no es o cerrar todo o dejar que “se muera quien se vaya a morir”, ya que entre esos dos polos hay muchas acciones que se podrían implementar.
“Indiscutiblemente, las actividades escolares, comerciales, todas las actividades humanas, no podemos seguir, después de dos años, cerrando y cerrando, porque tenemos un Gobierno que no ha tenido a bien tomar cartas en el asunto para detener los contagios”.
Explicó que si los gobiernos tomaran las medidas para detener los contagios, no habría necesidad de llegar al cierre; por ejemplo, haber hecho una revisión y vigilancia en las fronteras —que no implica el cierre de las mismas—, o evitar los eventos masivos con motivo de las fiestas decembrinas, cuando ya se sabía que había contagios de Ómicron; “haber pedido a los viajeros venir con pruebas negativas, eso no habría sido complicado, pero no se hace (...) Cuando se dice que no sirve de nada vigilar las fronteras, que no sirve de nada usar el cubrebocas, hacer pruebas, lo que pasa es esto: millones de contagios, miles de muertes, y cuando se empiecen a llenar los hospitales, no habrá más remedio que tener que cerrar”, concluyó.
- El dato: El último reporte del Gobierno capitalino, del martes, consigna un acumulado de un millón 11 mil 193 contagios en la pandemia, así como 52 mil 851 decesos por Covid-19.