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Carlos Urdiales

El cuento de cárcel a los ex. Otra vez

SOBRE LA MARCHA

Carlos Urdiales
Por:

Con más de 52 mil muertos por Covid-19 a cuestas, el Presidente López Obrador reedita un viejo episodio de comedia política a la 4T; meter a la cárcel a los expresidentes Felipe Calderón por haber encabezado un narco-Estado y a Enrique Peña Nieto por tutelar una cleptocracia (el poder basado en la corrupción).

Claro que para verlos vestidos de rayas (es un decir) el supremo tribunal popular antes deberá dictar el veredicto condenatorio en la plaza; no con las leyes en la mano —¿nada por la fuerza, todo por la razón y el derecho?— no, para nada, bastaría, insiste el Presidente, con juntar firmas, consultar al pueblo y si el aplausómetro lo manda, a la picota con los de antes.

López Obrador no miente; informó que ni la Fiscalía General de la República (FGR) investiga a ninguno de sus antecesores; tampoco la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) husmea sus cuentas, precisamente porque la FGR no tiene expedientes abiertos en su contra.

¿Entonces? Pues resulta que la tirria colectiva sobre Felipe Calderón, Genaro García Luna, Enrique Peña Nieto y Emilio Lozoya alcanza para desviar atención de los panteones llenos de muertos por una pandemia invisible a ojos de la 4T.

Mejor debatamos el proceso judicial que en la corte de Nueva York en Estados Unidos se lleva contra el exsecretario de Seguridad Federal que ni a juicio ha llegado y quizá, ni llegue por lo que cuantimenos existe una sentencia. Antes y mejor AMLO se retractó sobre el término “narco Estado”, porque dice que antes no le gustaba pero que ante la luz de lo que sabemos, es decir, puros trascendidos periodísticos; pues mejor sí.

Total, resulta que antes no sólo hubo rapaces neoliberales sino cárteles sometiendo al poder. Antes, no ahora. Haga caso omiso por favor de las producciones virales del Cártel Jalisco Nueva Generación de Don Mencho el intocable y olvídese del culiacanazo, de Ovidio o de la madre de El Chapo Guzmán; lo de antes fue peor.

Mejor especulemos con que Emilio Lozoya, el preso mejor tratado del mundo, va a cantar un do sostenido de pecho que reventará de tajo a todos los opositores panistas y priistas de Morena para 2021.

Nada se sabe de lo que ha dicho y aportado el exdirector de Pemex, pero con la imaginación basta y sobra. Juicio a los expresidentes si así el pueblo lo demanda. Con este cuento abrimos semana; con la Jefa de Gobierno confinada, con precios de las gasolinas al alza, con la inversión congelada y la grilla echando más chispas que los fuegos de artificio.

Y con el expresidente Calderón Hinojosa echado para adelante; “si tiene una sola prueba en mi contra, ¿Para qué se espera? De una vez que se proceda en mi contra, pero si lo que buscan es intimidarme, inhibir el descontento contra su Gobierno, están muy equivocados”. Así la nueva anormalidad.