Elecciones en Bosnia y Herzegovina

Enrique Andrade González

El pasado 12 de octubre se celebraron elecciones presidenciales en este lejano y muy peculiar país de Europa del Este. Se dijo que desde 1992 éstas serían las elecciones más importantes debido a que se estaría eligiendo a quienes durante los próximos cinco años ocuparían la Presidencia de este país. Y es que, dentro de lo especial de esta sociedad, se encuentra políticamente dividida en tres naciones aparentemente distintas pero escencialmente iguales: la bosnia, la serbia y la croata. Estas dos últimas son, además, países vecinos. En un mismo territorio convergen tres nacionalidades con representación política propia y por ello en las elecciones se elige un presidente de la sociedad de Bosnia, uno de Serbia y uno de Croacia. Son estos tres los que ejercen el Poder Ejecutivo de un país en constante adaptación y transformación, que tiene la mira puesta en la Unión Europea.

De esta forma tuve la oportunidad de que se me comisionara para aceptar la invitación de la Comisión Central Electoral de Bosnia y Herzegovina para ser observador en sus elecciones presidenciales, mismas que si bien por el tamaño de su democracia y número de electores —así como la extension de su territorio— no son de las más grandes, resulta particulamente interesante observarlas por tratarse de una sociedad que apenas hace 19 años se encontraba inmersa en una guerra civil y haber superado una crisis política de grandes dimensiones. Fue a través de un gran acuerdo entre las tres nacionalidades en un mismo territorio que se logró la convivencia democratica, y es en las elecciones cuando se renueva el pacto logrado en los Tratados de Dayton, valioso instrumento que ha permitido una paz duradera.

De las tres personas que se eligen para la presidencia, un mismo ciudadano bosnio puede votar por dos de ellos en una parte del territorio, mientras que en la otra solamente por uno de los tres; es decir, en la parte del territorio en donde predominan los croatas solamente pueden votar por este candidato y en donde predominan los serbios y bosnios pueden votar por dos, candidatos; es decir, se rompe el principio de una persona un voto para establecer en esa parte territorial el de una persona dos votos. Así, en las elecciones presidenciales se encuentran en contienda tres partidos políticos en promedio por cada espacio en la presidencia, tres que postulan al candidato de Bosnia, tres al de Serbia y tres al de Croacia. Cabe anotar que en estos comicios también se eligieron representantes de los cantones y del Parlamento.

Por su parte, la comisión electoral —que está integrada por siete comisionados designados por el parlamento— es la responsable de la organización del proceso electoral y del conteo de los votos emitidos. En la noche del día de la elección se dan a conocer los resultados preliminares solamente de la elección presidencial y es el momento esperado en que tanto observadores electorales nacionales e internacionales —así como las representaciones diplomáticas de otros países—, estamos a la expectativa de que no exista ningún conflicto postelectoral en una sociedad especialmente compleja.

Las votaciones —que iniciaron puntualmente a las 7 de la mañana del día de la jornada— transcurrieron en plena armonía y paz. Se tuvo una participación del 56 por ciento de los registrados en la lista de electores y en general se vivió un ambiente de civilidad e interés democrático —principalmente por las personas de mediana edad—. Es relevante destacar que se notó poca presencia de jóvenes en las casillas, lo cual responde —de acuerdo con lo que se me explicó— a un desencanto de este sector, que no percibe que su participación en las urnas se traduzca en una mejoría de sus expectativas futuras.

En diversos aspectos el proceso electoral tiene una menor regulación que el mexicano, principalmente en materia de radio y television, así como en materia de fiscalización. Por citar un ejemplo, la adquisición en medios es libre y la autoridad electoral no fiscaliza en este rubro, porque existe un financiamiento público menor al financiamiento privado o, en su caso, propio del partido o candidato, lo que lo hace además de más sencillo, más barato.

Por otro lado, el documento para votar en Bosnia es la cédula de identidad que emite el Estado y es permitido el voto postal para aquellos ciudadanos bosnios que se encuentren fuera de su territorio.

De esta enriquecedora experiencia dos cosas me sorprendieron: la primera es que la autoridad electoral goza de plena confianza de partidos políticos y candidatos, y su trabajo no es cuestionado por quienes no resultan ganadores. La segunda es que el día de la elección se dan conferencias de prensa en donde reconocen los resultados preliminares con las reservas del caso, pero no todos se declaran ganadores hasta que no se pronuncia a medianoche la autoridad electoral. A pesar de la complejidad de su sistema y de vivir políticamente divididos, su cultura democrática está consolidada.

Los ojos de Europa estuvieron muy pendientes del proceso democrático, ya que Bosnia y Herzegovina pretenden ingresar a la Unión Europea y eso solamente se logrará cuando las diferencias internas se procesen en códigos democráticos y al margen de la violencia, lo que en la pasada contienda electoral pudo visualizarse de manera clara y contundente.

La observación internacional es parte de la asistencia solidaria que existe entre autoridades electorales internacionales. A Bosnia y Herzegovina acudimos observadores de 21 autoridades electorales de diversos países. Este programa de asistencia internacional permite intercambiar experiencias y, en su caso, poder conocer nuevas y mejores prácticas electorales. No cabe la menor duda de que la tendencia es lograr la automatización de los procesos y, desde luego, una mayor participación y confianza ciudadana. En el mundo, el sistema electoral de México es reconocido y admirado por la regulación tan detallada que tenemos de variados aspectos, así como por el perfeccionamiento que el servicio profesional electoral ha logrado en la organización de las elecciones; un motivo de orgullo, formar parte de este gran esfuerzo.

Twitter: @e_andradeg