La profunda reflexión mexicana después de las elecciones

La profunda reflexión mexicana después de las elecciones
Por:
  • juanpablol-columnista

Las primeras declaraciones de Carlos Sada tras ser ratificado como embajador de México en Estados Unidos por la Comisión de Relaciones Exteriores del Senado tuvieron poca resonancia, pero son una muestra del problema de fondo que se ha presentado no sólo en el discurso de Donald Trump durante su campaña presidencial, sino también la retórica completa en ambos partidos respecto a México como el principal oponente en varios temas sobre los que se debate actualmente en la arena electoral.

El nuevo titular de la diplomacia dijo que México tendría que hacer "una profunda reflexión" sobre por qué nuestro país está siendo percibido de la manera en la que lo está siendo. Desde los ataques a los acuerdos comerciales de los demócratas Bernie Sanders y Hillary Clinton, quien recientemente aludió en dos ocasiones al tema de los derechos humanos en México, hasta el mencionado hasta el cansancio, discurso de odio y xenófobo, que se ha apoderado de la campaña republicana en todos sus candidatos y parte importante de sus simpatizantes.

De pronto México se convirtió en el tema principal. Está demostrado que el puntero Donald Trump, con la cantidad de tiempo aire gratis que ha conseguido con sus aseveraciones estridentes, tiene en su vecino el tema central y la palabra más recurrente. La manera propagandista en la que funcionan medios como Fox News y otros potencia el mensaje que permea en muchos entornos de la sociedad norteamericana y que deberían ser motivos de preocupación no sólo para el gobierno mexicano, sino también para el Estado y la sociedad.

El mismo día en que la prensa registraba las declaraciones del secretario de Hacienda, Luis Videgaray, en Nueva York, referentes a que el discurso de Trump era únicamente retórica, en las mismas planas Hillary Clinton advertía contra la seriedad de las amenazas de Trump. He mencionado aquí en ocasiones anteriores, sin ir a la guerra comercial, que resulta difícil pensar en retractarse de una promesa tan firme y clara pero a la vez tan sencilla, inmediata y populista como puede ser construir un muro en la frontera común.

La radicalización del discurso en ambos partidos ante la irrupción de candidatos inéditos ha movido la posición que usualmente se maneja en torno a México. Sin embargo las percepciones se basan en datos caducos y acomodados a la simple forma. Desde la falsedad de los trabajos perdidos, pasando por el valor productivo de la cadena misma, hasta las cifras migratorias de México a Estados Unidos.

El desinterés mostrado por gran parte del Senado al tener atorada la confirmación de un embajador de Washington en México sólo se suma a la lista de temas que habrá que considerar en la reflexión que pide el embajador Sada. El valor y las aportaciones del país a los estadounidenses en todos los sentidos son tan ricos y valiosos, como la relación misma. Un vínculo que está siendo golpeado por ambos bandos, a la espera de que termine la pelea y comience el recuento de daños.

juanpadeleo@me.com

Twitter: @juanpadeleo