Mercado Laboral: nada que presumir todavía

Mercado Laboral: nada que presumir todavía
Por:
  • arturov-columnista

Cifras de enero y febrero confirman continuidad en las condiciones laborales, los salarios contractuales siguen creciendo en términos reales, a la vez que el crecimiento del empleo formal (trabajadores afiliados al IMSS) parece haber frenado su desaceleración; no obstante, existen enormes ventanas de oportunidad en el ámbito del mercado laboral.

Revisando datos, en febrero, se manutuvo el incremento nominal de los salarios contractuales. Durante el segundo mes del año, 212.5 mil trabajadores negociaron su salario; de los cuales, el 92% correspondió al sector privado con un incremento de 4.3% (4.4% en el mismo mes del año pasado), y un 9.0% fueron incrementos a trabajadores del sector público que promediaron 3.2% (3.3% en el mismo mes del año anterior). El incremento promedio fue de 4.2%.

Los incrementos reales continúan, pero a un menor ritmo debido a repunte de la inflación anual: para el caso del sector privado, el incremento real de los salarios contractuales ascendió en enero a 1.3% anual y para el sector público de 0.3%; ambos por debajo del promedio del año pasado de 1.7% y 0.8% respectivamente.

En paralelo, durante febrero logra mantenerse la dinámica de creación de empleo en el sector formal. El crecimiento anual de 3.8% en el empleo formal fue prácticamente el mismo que en enero. Con respecto a febrero del año pasado se crearon 662 mil nuevas plazas. Asimismo, de acuerdo con estimaciones propias de cifras desestacionalizadas, respecto al mes anterior, el empleo formal avanzó en febrero 0.36%, es decir, se crearon 64.5 mil nuevos empleos respecto a enero, cifra que estuvo por arriba del promedio de la generación mensual de todo el año pasado, 54,000. Así, las cifras recientes del primer bimestre revelan una pausa en el proceso de desaceleración vista hacia finales del año pasado, y posiblemente, de acuerdo a estimaciones propias, estamos frente al inicio de una nueva fase de expansión moderada en el empleo formal.

A estas cifras podemos añadir la tendencia descendente del desempleo. En enero, la tasa de desempleo se redujo hasta 4.24% de la Población Económicamente Activa (PEA), que es la tasa más baja en los últimos ocho años. De igual forma la tasa de desempleo en zonas urbanas ha descendido drásticamente hasta niveles del 4.79% de la PEA.

Estas cifras, aunque positivas en la cantidad de empleo, distan de mostrar todavía condiciones favorables en la calidad del desempleo. Así lo corroboran los aumentos anuales durante febrero en las tasas de ocupación parcial y desocupación, de subocupación, de condiciones críticas y de informalidad laboral. Esta última además con un nivel muy alto de 58% del personal ocupado.

Sin menosprecio de los logros de corto plazo, en materia laboral, deben fortalecerse todavía más las condiciones económicas, a través de una mayor y persistente inversión en capital físico y humano que logre aumentos significativos en la productividad y el empleo, lo que finalmente redundará en mejores condiciones laborales.

avieyra@banamex.com

Twitter: @ArturoVieyraF