Nosotros los Gómez

Enrique Acevedo

En 1987, el Canal 2 estrenó una barra de programación que incluía la serie de televisión Nosotros los Gómez. Una comedia de situación que narraba las aventuras de una familia de clase media en la Ciudad de México.

La mayor parte de los episodios ocupaban la residencia de los Gómez: Chachita, Freddy y sus seis hijos. El programa, producido por Humberto Navarro, buscaba reflejar la realidad de una pujante y cada vez más numerosa clase media mexicana, aunque el show saldría del aire tres años después, a principios de los noventa, en la década que desinfló nuestra aspiración colectiva por el desarrollo.

No existe un consenso académico que defina con precisión lo que es la clase media pero, los que saben, utilizan una lista de parámetros que la definen a través de los hábitos de consumo de sus miembros. El tráfico en las ciudades, la tasa de desempleo, el mercado de bienes raíces, el porcentaje de mujeres en la fuerza de trabajo, la compra de electrodomésticos y el turismo, también conocido como el “shopping”.

Por eso llama la atención el reporte dado a conocer en Washington esta semana por el New Policy Institute y el Centro de Estudios Transfronterizos de la Universidad estatal de Arizona, el cual revela que durante 2010, más de 13 millones de turistas mexicanos visitaron los Estados Unidos.

El informe señala que juntos, México y Canadá, representan alrededor del 55 por ciento del total de las entradas formales de extranjeros a los Estados Unidos y cerca del 21 por ciento de los 134 billones de dólares que los turistas dejan en ese país.

Las cifras de alguna forma complementan el extenso trabajo realizado por Luis de la Calle y Luis Rubio, en la obra México: una sociedad de clase media, publicada recientemente a través del Woodrow Wilson Center y en la que se advierte del surgimiento de la clase media en el país, algo que los autores califican como el acontecimiento más relevante de la última década.

Por lo que su consolidación, lee el documento, es uno de los puntos más importantes en la agenda del México del futuro.

El estudio presenta una generosa cantidad de datos duros e información que muestran la transformación de la sociedad mexicana a un conjunto heterogéneo, ideológicamente dividido entre las principales fuerzas políticas del país. Una sociedad que en su mayoría, se considera parte de la mitad, es decir, ni tan, tan, ni muy, muy.

De los ajustes estructurales pendientes y la agenda de los candidatos dependerá que el resurgimiento de esta clase media mexicana no termine siendo otra historia de oportunidades desaprovechadas. Otra serie cancelada.

 La Caminera. Es buena noticia que un sismo intenso como el del martes, no ocasionara daños catastróficos en la zona afectada. Que sirva de lección para avanzar en la cultura de prevención que tanta falta hace en nuestro país.

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