Edicson Ruiz y su meteórica carrera contra la corriente

El músico venezolano Edicson Ruiz, quien es considerado uno de los más destacados contrabajistas en la actualidad, ha tenido siempre una meteórica carrera contra la corriente: a sus 17 años se convirtió en el primer latino y el más joven en ingresar a la Orquesta Filarmónica de Berlín, se ha empeñado en desempolvar la música para contrabajo y difundirla en todos los rincones del mundo, aunque las disqueras ya no suelen apoyar álbumes de música clásica, se ha empecinado en buscar la manera de lanzar nuevos discos y aprovecha al máximo la tecnología para hacer que la música sea de muchos.

“Ha sido realmente una carrera meteórica contra la corriente, porque vienen programando siempre los mismos instrumentos, violín, viola, piano, chelo, trompeta, corno, pero el contrabajo es totalmente inusual también por su timbre, que es bastante ronco, pero por ello me dediqué a la investigación y a la práctica de la afinación antigua del siglo XVIII. Ha sido realmente apasionante desempolvar y llevar a la luz, documentar e incluso popularizar estas obras totalmente desconocidas como realmente fueron concebidas”, compartió Edicson Ruiz en entrevista telefónica con La Razón, recién llegando a la Ciudad de México, donde los próximos 15 y 16 de julio presentará el Concierto para contrabajo, de Efraín Oscher, con la Orquesta Sinfónica de Minería.

Este trabajo de difundir la música para contrabajo lo ha hecho con apoyo de su mentor Félix Petit y la visión del chelista barroco neerlandés Anner Bijlsma (1934-2019). Uno de los recientes trabajos encaminados en dar a conocer dicha música es el disco que lanzará el próximo invierno de Escribí (2022), concierto para orquesta, contrabajo y acordeón, de Klaus Ospald.

“Hoy es todo un reto, las empresas discográficas ya no financian estas grabaciones, hay que buscar aliados, afortunadamente teníamos el patrocinio de la WDR. Fue apoteósico, eso facilitó mucho las cosas; al no financiar las disqueras estos proyectos nos ponen cuesta arriba, más con la música contemporánea que tiene tanto viento en contra. Ha sido un proyecto muy idealista, visionario, el video que puse por Instagram se volvió viral, tiene más de 40 mil visitas y eso que es música contemporánea, que es como quien dice, el vidrio molido”, resaltó.

Ruiz ha visto en la tecnología a un aliado de la difusión del arte. “En lugar de dejar devorarnos por la pantalla es usarla para estos nobles cometidos, hacer que la música sea de todos, no de pocos para pocos, sino de muchos para muchos”, compartió Ruiz, a quien le han dedicado obras autores contemporáneos como Heinz Holliger, Toshio Hosokawa, Helmut Zapf, Paul Desenne y Efraín Oscher, entre otros.

Un homenaje latino

 Edicson Ruiz, quien desde el 2001 radica en Berlín y en la actualidad hace giras por todo el mundo como solista, siempre está encantado de volver a sus orígenes.

Presentarse este fin de semana con la Orquesta Sinfónica de Minería es un sueño que ha tenido durante décadas, pues indirectamente ha estado relacionado con esta agrupación. Quien fuera su maestro, Klaus Stoll, solía venir a la Ciudad de México cada año para colaborar con esta compañía y cuando estaba en Venezuela vio tocar a Carlos Prieto, reconocido violonchelista mexicano y padre de Carlos Miguel Prieto, director de la OSM. Además, admiró el trabajo del batuta y compositor de tierra azteca Eduardo Mata.

 “Definitivamente soñaba tocar una vez ahí, desde hace 13 años que toqué en el Palacio de Bellas Artes con la Orquesta Sinfónica Nacional, di una master class en la OFUNAM y pasaron la Sala Nezahualcóyotl.

“Estoy viviendo un momento único en mi vida, uno de mis grandes picos en la carrera… Es regresar a México con un mensaje, que es el de la popularización y divulgación del contrabajo en su esplendor antiguo”, comentó el músico venezolano.

Para Ruiz será un homenaje a la música latinoamericana, pues coincide que su compatriota Gabriela Montero estrena su Concierto latino para piano y orquesta; él interpreta el Concierto para contrabajo de Oscher y se ejecuta La consagración de la primavera, de Stravinski, a ésta última le encuentra relación con los mayas y los aztecas.

“Es parte de nuestra tradición, cultura, identidad, danzas, la guaracha, los joropos, el guaguancó, la milonga, pero también expandirnos a lo iberoamericano, teniendo ápices del flamenco, del rock latino, Carlos Santana, un poquito de la capoeira, los pajarillos de Venezuela, todas estas danzas van a estar a flor de pie”, aseveró el contrabajista.

Insistió en que será “un homenaje a la latinoamericanidad. Va a ser un concierto memorable, contra todo pronóstico”. Para hacerlo inolvidable lanzó la invitación a Montero: “Creo que se puede dar un bis, un encore con Gabriela, vamos a ver si ella se deja, a ver cómo llega, si viene con el moño virao o no”.