Ópera "El amor distante" alista estreno en América Latina

Ópera "El amor distante" alista estreno en América Latina
Por:
  • argelia villegas

La fusión de música de orquesta y electrónica, así como una escenografía abstracta y más de 20 cambios de vestuario son algunos elementos que conforman la nueva apuesta de la Compañía Nacional de Ópera del Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (INBAL) para la pieza El amor distante, de la reconocida compositora finlandesa Kaija Saariaho.

El montaje llega por primera vez a la Ciudad de México para estrenar en América Latina una historia tan sencilla como grandiosa.

“Es la ópera contemporánea que más veces se ha puesto en escena en los grandes teatros del mundo. Ésta es la onceava producción; las capitales del mundo la han presenciado. La historia es muy sencilla, se explica en tres segundos, su lenguaje universal es único”, explicó a La Razón José Areán, director

musical de la obra.

El amor distante narra la historia de Jaufré, quien escribe poemas a un amor ideal que sabe que no podrá encontrar. Un peregrino que lo escucha le hace saber que sí existe una mujer como la que anhela, pero que está

al otro lado del mar. Mientras que a Clémence le cuenta del poeta que la ama en la lejanía.

Incrédula, ella prefiere mantenerse al margen. Cuando el peregrino vuelve una vez más con Jaufré, éste decide emprender la travesía hasta la lejana Trípoli para entregar su amor a la mujer de sus sueños; sin embargo, el tortuoso viaje le hace caer enfermo. Éste llega agonizante a los brazos de Clémence. Tras su muerte, la dama decide entrar en un convento, donde elevará plegarias por su perdido amor distante.

El amor distante

Dónde: Sala principal del Palacio de Bellas Artes

Horarios: domingos 31 de marzo y 7 de abril a las 17:00 horas

y el martes 2 y el jueves 4 de abril a las 20:00 horas

Localidades: De $90 a $650

Su lenguaje universal es el elemento principal de su éxito, pues la historia está inspirada en una leyenda del siglo XII del trovador provenzal Jaufré Rudel y fue el escritor franco-libanés Amin Maalouf quien realizó el libreto de la obra que será interpretada por el barítono finlandés Jaakko Kortekangas, en el papel del príncipe Jaufré Rudel; la soprano de origen polaco Agnieszka Slawinska participa como la condesa Clémence y la mezzosoprano mexicana Carla López-Speziale encarnará al peregrino.

“Estoy muy contenta con mi personaje, porque soy el vínculo de una pareja que se ama a pesar de la distancia. Yo seré quien vaya de un lugar a otro conectando a los enamorados”, dijo a este diario López-Speziale, quien es reconocida por su voz “bella, cálida y con un registro agudo y suave”.

En la música de la puesta en escena destacará la diversidad de sonidos. “A nivel musical podrán disfrutar de un gran recital colorido, que se mezclará con sonidos electrónicos. Se amplía la paleta de color con música de color, además de contar con un gran elenco orquestal y un elenco de primer orden a nivel internacional”, agrego Areán.

Para López-Speziale, lo más importante es que la creación de Kaija Saariaho fue diseñada para ser comprendida ante cualquier público.

“La historia es sublime porque es sencilla y el mensaje es universal porque tiene sus bases en una bella historia de amor; es la primera vez que llega a México y esperamos sea un regalo para la audiencia”, detalló la intérprete.

El dato: La pieza tuvo su estreno mundial el pasado 15 de agosto de 2000, en el marco del Festival de Salzburgo.

Por su parte, el director de escena de la puesta, Mauricio García Lozano, refirió que “veremos un espectáculo alucinante. Aborda una metáfora muy complicada, por lo que el montaje requiere que sea tan hipnótico como la música y el texto”.

Aunque el espectáculo tendrá como eje a una pareja enamorada, el gran protagonista también es el mar Mediterráneo que separa a los amantes; pero también es el mar interior donde ocurre la pasión, el amor, de donde vienen los huracanes y tormentas de la duda, explicaron Areán y López-Speziale.

La Orquesta del Teatro de Bellas Artes, estará bajo la dirección de José Areán, y el Coro del Teatro de Bellas Artes, dirigido por Cara Tasher y Luis Manuel Sánchez Rivas.

La dirección escénica es de Mauricio García Lozano; la escenografía, de Jorge Ballina; la iluminación, de Víctor Zapatero y Rafael Mendoza; el vestuario, de Mario Marín, y el maquillaje, de Maricela Estrada.

La obra, considerada una de las más relevantes en la ópera contemporánea, fue estrenada en el Festival de Salzburgo con gran éxito, presentación a la que han seguido una serie de funciones, entre las cuales destaca la que mayor difusión ha tenido en el Metropolitan Opera House de Nueva York.