Ricardo González Cepillín llegó al mundo del clown por casualidad: era dentista y al participar en una campaña de salud bucal enfocada al público infantil decidió pintarse la cara para mostrar un rostro amable y divertido a los menores. Lo que empezó como un hobby pronto se convirtió en su profesión de toda la vida y con ésta alcanzó fama internacional.

La mañana de ayer, tras nueve días de estar internado en un hospital del Estado de México al sufrir una caída, la sonrisa de Cepillín se desdibujó: falleció a los 75 años, a causa de un paro cardiaco.

Sus hijos Ricardo y Aydé González señalaron al programa Hoy que el intérprete de “Tomás” sufrió dos paros cardiacos, en el primero, los médicos lo pudieron reanimar, pero el segundo fue fulminante.

“Él entró en paro, lo revivieron, pero sus órganos ya estaban muy dañados. Después de eso nos pidieron que entráramos uno por uno y hablé con él. Hasta en sus últimos momentos le dimos su comida favorita: cabrito. Entró mi hermano con mi mamá, salieron y diez minutos después tuvo un paro y ya no pudo resistir su corazón, el cual estaba funcionando en 50 por ciento”, compartió la hija de Cepillín.

El payasito de la tele, quien nació el 7 de febrero de 1946 en Monterrey, Nuevo León, ingresó al hospital el pasado 28 de febrero, porque presentaba dolores en la columna, fue intervenido el domingo y le detectaron cáncer.

“Cuando el hospital hace la operación ve un tejido con cáncer; tiene linfoma. Entonces eso le bajó el sistema inmunológico a mi papá y por esa razón lo tuvieron que meter a terapia intensiva”, declaró el hijo de Cepillín ante los medios de comunicación, la mañana de ayer, antes de que falleciera el cantante de “La gallina co-co-ua”.

Detalló que se le iba a someter a un tratamiento para erradicar el tejido maligno en la espalda. Se esperaba que lo dieran de alta hoy, pero su salud empeoró, pues registró insuficiencia cardiaca y una neumonía.

Durante los días que duró hospitalizado, su familia pidió ayuda económica, pues por la pandemia de Covid-19 y ante la cancelación de espectáculos su economía se había visto mermada. Actrices como Angélica Vale también se unieron a esos llamados.

Los restos del payasito de la tele se velaron en una funeraria ubicada en el Estado de México, ayer, desde las 17:00 horas, informó su familia, a través del canal de Facebook del artista.

Cepillín tenía 50 años de trayectoria y apenas había celebrado su aniversario, pero confiaba en recuperarse para festejar en grande, quería, cuando las condiciones lo permitieran, realizar un concierto masivo en el Zócalo de la Ciudad de México.

Ricardo González saltó de su consultorio a la televisión cuando le ofrecieron participar en un programa infantil, que se transmitía de lunes a viernes y se llamaba La hora de la merienda, pero debido al éxito se extendió también a los fines de semana. Permaneció seis años en la pantalla chica de Nuevo León.

Ricardo González

​Cepillín

Después buscó suerte en la Ciudad de México, donde protagonizó el programa El show de Cepillín, en el cual invitaba a artistas nacionales e internacionales. Fue en esa época cuando alcanzó la fama y era habitual que los infantes lo vieran en la pantalla chica, de ahí que luego se le conociera como el payasito de la tele.

En ese programa solía interpretar sus canciones, pues comenzó a incursionar en la música con el tema “Un día con mamá”. Algunos de sus éxitos fueron “La feria de Cepillín”, “Tomás”, “En un bosque de la China” y la famosa versión de “Las mañanitas”.

Tras su salida de la TV comenzó a ofrecer shows en los circos, pero también incursionó en el cine con películas como La corneta de mi general y Mientras haya niños habrá payasos.

Siempre se mantuvo activo y se adaptó a los nuevos tiempos: abrió su canal de YouTube, el cual suma 1.37 millones de suscriptores y ya tenía su cuenta en TikTok, la red social de moda.

Del consultorio a la TV