¿Fin de contraseñas a la vista? compañías piensan eliminarlas

Crear una contraseña es una incomodidad para una gran cantidad de usuarios. Una clave que no sea lo suficientemente segura puede ocasionar que los datos privados o la información bancaria de una persona caigan en manos ajenas, este problema puede traer consecuencias insospechables, desde un mal uso de la información hasta fraudes financieros.

Por ello, los usuarios de diversas redes sociales y aplicaciones se ven obligados a emplear contraseñas cada vez más complejas y difíciles de recordar. Según un análisis del centro de investigación Pew Research Center, sólo en Estados Unidos, cuatro de cada 10 adultos olvidan sus contraseñas web.

Y de acuerdo con el informe “Psicología de las contraseñas: buenas y malas prácticas en cuanto a las contraseñas y la vida digital”, en 2021 el 68% de las personas entrevistadas declaró que reutilizan una misma contraseña porque les preocupa olvidarla. Además, el 79 por ciento mostró preocupación por el robo de contraseñas digitales.

Al respecto, Panda Security, empresa española especializada en la creación de soluciones de seguridad informática, advierte que el peligro de usar una misma contraseña es que si un ciberatacante obtiene la contraseña de un sitio y ésta se repite, podrá tener acceso al resto de los perfiles, multiplicando el daño

Para resolver esta problemática, las grandes compañías como Apple, Google y Microsoft se han propuesto un futuro sin contraseñas, para ello hay una gran alianza entre las tecnológicas para convertir al teléfono en la llave maestra para acceder a dispositivos, webs y apps.

En búsqueda de un futuro cercano sin contraseñas, Apple, Google y Microsoft se han aliado con FIDO (Fast Identity Online Alliance), un consorcio de empresas tech, agencias gubernamentales y proveedores de servicios, los cuales tienen como objetivo eliminar las contraseñas desde hace casi 10 años.

El sistema FIDO propone iniciar sesión utilizando el celular como llave maestra mediante los sistemas biométricos para identificar a los usuarios y acceder fácil.

La biometría, clave para combatir este problema.La biometría son aquellas medidas biológicas, o características físicas, que se pueden utilizar para identificar a las personas. Las huellas dactilares, el reconocimiento facial y los exámenes de retina son formas de tecnología biométrica y también son las opciones más comunes y conocidas.

Actualmente, la biometría, como Face ID y Touch ID en iPhone y lectores de huellas en el caso de Android, permiten acceso a los teléfonos móviles sin contraseña. Por su parte, Google está trabajando para que los usuarios puedan iniciar sesión en el ordenador sólo con desbloquear el móvil mediante biometría. Igualmente, Apple ya permite desbloquear el Mac con el Apple Watch.

También, algunas aplicaciones de bancos, monederos y plataformas de pago ya usan la huella digital para el ingreso del usuario. Aunque algunas de estas apps hacen una combinación de contraseña y datos biométricos. Algo de lo que propone FIDO.

Así es, de acuerdo con el consorcio, para proteger un móvil, aplicaciones o sitios web de forma biométrica, es necesario también contar con un PIN o contraseña como método alternativo. Por ello, una de las principales ventajas de la biometría es la seguridad que brinda, ya que es una herramienta personal e intransferible.

Pero la biometría no sólo implica el reconocimiento facial o huellas dactilares; existe la biometría avanzada, la que se utiliza para proteger documentos confidenciales. Un ejemplo de ello son los bancos que ya utilizan el reconocimiento de voz, o el banco británico Halifax, el cual está probando dispositivos que monitorean los latidos cardiacos para verificar la identidad de sus clientes.

Además, la biometría tiene una gran ventaja tomando en cuenta que, según el administrador de contraseñas NordPass en su informe anual The Awful Password List, la contraseña más utilizada del 2021 fue 123456. La combinación fue utilizada en más de 103 millones de cuentas en 50 países del mundo.

Ante esta cifra, la propuesta de FIDO, el consorcio con el que las grandes compañías se han unido, permite a los servicios en línea y sitios web aprovechar de manera transparente las características de seguridad nativas de los dispositivos de usuario mediante la autenticación biométrica.

Este proyecto, según Google, estará listo para ejecutarse en 2023 y servirá para proteger un móvil de forma biométrica, sumado con un método alternativo.