Aumento de delitos sexuales contra menores en último año alarma a ONG

La Red por los Derechos de la Infancia (Redim) alertó que los delitos sexuales contra menores de edad continúan en cifras altas, a pesar de la pandemia por el Covid-19. Y agregó que, de cada 100 casos de abuso sexual infantil, sólo tres se castigan con cárcel.

“El porcentaje de impunidad en la niñez es de 97 por ciento, lo cual no es buena noticia, ya que las autoridades deben cambiar su práctica a favor de la infancia, porque los delitos de índole sexual persisten en México. Esto es, de cada 100 delitos, sólo tres alcanzan sentencia”, aseguró a La Razón el director del Redim, Juan Martín Pérez.

De acuerdo con datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), en 2020, el número de abuso sexual contra menores tuvo una ligera disminución de seis por ciento pese a estar en confinamiento, al registrar 22 mil 377 casos contra 23 mil 625, en 2019.

Sin embargo, la violación equiparada, el acoso sexual y el incesto registraron un importante repunte. El primero pasó de tres mil 674 casos a cuatro mil 425, es decir, 20 por ciento más; mientras que el acoso sexual tuvo un alza de 33 por ciento, pues en 2019 hubo cuatro mil 204 y para el siguiente año subió a cinco mil 598. En cuanto al incesto, éste fue el que registró el mayor incremento al pasar de 14 a 42 mil 200 por ciento más.

Ante este panorama, Martín Pérez aseguró que los números podrían ser mayores, pues hay casos en que los papás no presentan la denuncia para no exponer a sus hijos.

Por ello, celebró la detención del exgobernador de Puebla Mario Marín, el góber precioso, a quien se le señala por sus vínculos con redes de pederastia.

“Es una buena noticia porque da la sensación de que se pueden tocar a los poderosos”, dijo, aunque advirtió que no se puede cantar victoria para erradicar estos delitos, pues “la pornografía infantil y la explotación sexual de menores en medios digitales han crecido al paso de los años. Aún falta mucho por hacer y en algunos casos, falta voluntad política de las autoridades para hacer cumplir la ley”.

De acuerdo con la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) cada año, 5.4 millones de menores son víctimas de abuso sexual y en 60 por ciento de los casos, el agresor es una persona cercana a la familia.

Para la organización Causa en Común, el que haya impunidad en 97 por ciento de los casos de delito sexual infantil, es muy grave y refleja la situación que impera en el país.

“Mientras las Fiscalías no funcionen ni sean capaces de presentar casos sólidos frente a un juez, las cosas van a seguir igual, eso es términos generales, pero en términos políticos la impunidad puede ser más grande”, advirtió María Elena Morera, directora de la ONG.

La activista dijo a este diario que siempre se ha visto que la justicia en México es muy cara, ya que no todos pueden acceder a ella. En torno a las redes de tráfico de personas, secuestro y uso de menores para fines sexuales, lamentó que no haya operativos que atrapen a los delincuentes, ya que los golpes que se dan sólo son mediáticos, como el del exgobernador de Puebla, Mario Marín, a quien detuvieron en Acapulco, Guerrero.

“Fue un golpe mediático porque ni siquiera sabemos si lo vayan a sentenciar, pus no sabemos cómo está la investigación. Qué bueno que lo detuvieron, pues da esperanza a las víctimas en las redes de trata en las que presuntamente estaba, pero no creo que las cosas cambien por detener al señor Marín”, dijo.

Morera añadió que en los últimos años las bandas criminales sólo se dedicaban a la trata de personas, pero al paso del tiempo ha ido cambiando y se dedican al abuso de niños presencial y en lo digital, lo que es grave porque las autoridades “están como dormidas”.

“Las autoridades están rebasadas en este tema de abuso infantil y en muchos otros relacionados. Las Fiscalías están rebasadas, ya que la mayoría de los casos quedan en la impunidad, por ello la gente se desespera y comienza a realizar linchamientos y ver atrocidades en el país, por falta de justicia”, abundó.

Los activistas coincidieron que la falta de interés de las autoridades, aunado a la falta de voluntad política para meterse de lleno el tema, continúa generando delitos que no se castigan y agresores que siguen en las calles, haciendo de las suyas.