Economía mexicana se estanca a 0.0%

En el segundo trimestre del año, la economía mexicana no registró variación en términos reales respecto al primer trimestre, con cifras ajustadas por estacionalidad, informó el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).

El organismo señaló que el resultado de 0.0 reportado en el periodo abril-julio es menor al avance de 0.1 por ciento dado a conocer con estimación oportuna a finales de julio pasado.

El resultado quedó por debajo de las expectativas que tenían los analistas, quienes esperaban un crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) de 0.1 por ciento, en su comparación trimestral y con cifras ajustadas por estacionalidad.

Por tipo de actividad, el sector que tuvo un peor desempeño fue el primario, que se contrajo a una tasa de 3.4 por ciento trimestre contra trimestre, sin cambios con respecto al dato preliminar. A éste le siguió el sector industrial, que sufrió un ajuste a la baja y pasó de no tener variación a observar una contracción de 0.2 por ciento entre abril y junio frente a los tres meses previos.

Por su parte, el sector de los servicios, que ha sido durante años el principal impulso de la actividad económica, confirmó un avance de 0.2 por ciento en el segundo trimestre del año.

Pese al ajuste a la baja en el PIB de abril a junio, al mantenerse casi estable, con un nulo avance, luego de descender 0.3 por ciento entre enero-marzo de este año, evitó lo que se denomina “recesión técnica”, ya que no ligó dos trimestres consecutivos a la baja.

Para Banorte Análisis, el PIB se estancó también porque las actividades gubernamentales cayeron 4.0 por ciento, debajo del -3.2 por ciento del trimestre anterior. Consideró que esto se debe a las medidas de austeridad del Gobierno federal. También resaltó la caída de 5.5 por ciento en servicios corporativos, su cifra más baja desde el cuarto trimestre de 2013.

Sostiene que los detalles muestran que la actividad industrial continúa como el eslabón más débil, con este sector revisado a la baja a -0.2 por ciento, hilando así tres trimestres consecutivos en terreno negativo. El principal responsable fue el sector de la construcción al caer 2.9 por ciento, mientras que la minería se contrajo 1.1 por ciento, similar a la caída del trimestre previo.

Incluso en su último comunicado de política monetaria, el Banco de México (Banxico) pronosticó que “en un entorno de marcada incertidumbre, el balance de riesgos para el crecimiento continúa sesgado a la baja”.

El Dato: Un análisis de Banorte ajustó su previsión del Producto Interno Bruto para este año en 0.8 por ciento, 1.0 para el tercer trimestre y 1.6 por ciento para el cuarto trimestre del año.

Asimismo, precisó que los servicios avanzaron 0.2 por ciento, lo que no fue suficiente para revertir la caída de 0.3 por ciento del primer trimestre del año. Ocho de los quince subsectores crecieron, dos no mostraron cambios (inmobiliarios y gubernamentales) y cinco se contrajeron, con los servicios profesionales mostró la mayor caída (3.3 por ciento). No obstante, las ventas minoristas se aceleraron a 1.7 por ciento desde 0.9 por ciento, mientras que otros servicios también crecieron 2.9 por ciento.

Finalmente, Banorte pronosticó un crecimiento para todo el año en 0.8 por ciento anual, mientras que anticipa un PIB del 1.0 por ciento para el tercer trimestre y de 1.6 por ciento para el cuarto trimestre.

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