El año de Molière

Así como en 2021 se celebró por toda Europa el año de Dante, en 2022 se conmemorará el de Molière. Nació Jean-Baptiste Poquelin, mejor conocido como Molière, el 15 de enero de 1622, en París. Entre sus obras teatrales más conocidas podemos contar a El Tartufo, El enfermo imaginario, El avaro, El burgués gentilhombre, El misántropo y Las mujeres sabias.

La lista de actividades que se llevarán a cabo en Francia es muy larga. La Universidad de la Sorbona y la Comedia Francesa han organizado un magno coloquio internacional sobre la obra de Molière que se realizará del 6 al 9 de enero. Además, habrá todo tipo de eventos académicos, exposiciones en museos, publicaciones de libros y, por supuesto, múltiples representaciones de sus obras en teatros de toda Francia. Podría apostar a que no quedará una sola de sus piezas teatrales sin escenificar.  

Esperamos que, en 2022, ya con la pandemia media domada, podamos disfrutar en nuestro país de algunas puestas en escena de las obras de Molière. En España se nos han adelantado. En el Teatro Fernán Gómez, de Madrid, se estuvo representando con éxito El enfermo imaginario de Molière. Por desgracia —y por ironía— los actores se enfermaron de Covid y han tenido que clausurar el resto de la temporada. Por cierto, esta comedia viene muy a cuento con la pandemia que hemos padecido y que nos ha obligado a encerrarnos no sólo en nuestras casas, sino en nosotros mismos. A la pandemia del Covid habrá que sumar la de hipocondría.  

Una comedia que no pierde actualidad —y que, hoy día, quizá, haya cobrado todavía más relevancia— es El Tartufo. La relación entre esta pieza y México viene de antaño y posee, incluso, una prosapia independentista. Se cuenta que cuando Miguel Hidalgo fue cura en San Felipe Torresmochas organizó una representación de El Tartufo. En la película Hidalgo, la historia jamás contada de 2010, se narra —con mucha imaginación— este suceso.  

El Tartufo cuenta la historia de un impostor, Tartufo, que se aprovecha de su protector, Orgón, un hombre rico. Tartufo se las da de un hombre piadoso, devoto, virtuoso, pero en realidad es un hipócrita, un aventurero que no respeta ninguna moral. Tartufo está a punto de salirse con la suya: despojar a Orgón de su fortuna, casarse con su hija Mariana y aprovecharse de su esposa Elmira. En la última escena se hace justicia y Tartufo recibe su castigo. En esta brillante comedia, Molière hace una crítica feroz a la hipocresía moral y religiosa. Lo que nos muestra es que hay ocasiones en las que aquellos que aparentan ser personas de Dios y de bien, esconden, detrás de una careta, su ambición vulgar y su espíritu cochambroso. La palabra “Tartufo” se ha incorporado a nuestro idioma para denotar a una persona con esas características.