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Cambios eliminan confusiones, asegura su titular

Conacyt avala reforma al SNI; deja niveles de investigadores

Elena Álvarez-Buylla dice que quedó un reglamento “acorde a la realidad del país”; no dan a conocer el documento final; cambios entrarán en vigor en 2022 y respetan convenios.

La reforma aprobada por Conacyt busca que los académicos contribuyan a la solución de retos prioritarios para el país para el “bienestar del pueblo, la salud y el cuidado del medio ambiente”.Foto: Cuartoscuro.
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El Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) aprobó por unanimidad la reforma al Sistema Nacional de Investigadores (SNI) en una sesión extraordinaria privada.

El organismo dirigido por María Elena Álvarez-Buylla aseguró que se conservarán todos los niveles del SNI: candidato, I, II y III y Emérito. Sin embargo, no dio a conocer el documento.

En días previos los integrantes del sistema expusieron su inconformidad por la serie de cambios realizados sin consultar a la comunidad científica en la actual administración.

La reforma al reglamento busca que los académicos contribuyan a la solución de retos prioritarios para el país para el “bienestar del pueblo, la salud y el cuidado del medio ambiente”.

En redes sociales, el Conacyt indicó que en la reforma se detallaron los requisitos de ingreso, reingreso, permanencia o promoción dentro del sistema de acuerdo a los méritos o requisitos de las convocatorias.

En tanto, mencionó que se fortalecerá la investigación humanística, científica y tecnológica de todos los campos de conocimiento “bajo los principios de equidad y pluralidad epistémica”.

La Razón adelantó el pasado 28 de febrero que el Conacyt presentaría una reforma al reglamento del SNI entre las que incluía derogar y modificar artículos como el 63 que establece el monto del estímulo a los investigadores de acuerdo a su nivel.

El organismo afirmó que la reforma reconoce la labor docente como una actividad integral y fundamental para la formación de científicos en México.

A su vez, expuso que se hicieron modificaciones con base en recomendaciones del Consejo Nacional para Prevenir La Discriminación (Conapred) para tener un lenguaje incluyente en la redacción del documento.

“Las y los miembros del SNI son uno de los principales rostros humanos de la ciencia y la tecnología del país. Su trabajo en docencia, investigación y difusión del conocimiento es vital para el desarrollo, independencia y soberanía científica de México”, concluyó.

María Elena Álvarez-Buylla celebra reforma al SNI

La directora de Conacyt, María Elena Álvarez Buylla celebró la aprobación de la reforma al reglamento del SNI, ya que aseguró que se eliminan las confusiones de la versión anterior.

Es la segunda reforma que se realiza en su gestión. La anterior fue aprobada en agosto y dada a conocer el 21 de septiembre de 2020 en el Diario Oficial de la Federación.

Queda un reglamento congruente con la realidad del país, inmerso en un proceso profundo de transformación. Un Reglamento que se podrá leer y juzgar en sus méritos, sin mentiras ni tergiversaciones

Elena Álvarez-Buylla
Directora del Conacyt

Álvarez-Buylla Roces precisó que los cambios entrarán en vigor en 2022 y que no afectarán los convenios previamente.

La académica reconoció la importancia de las instituciones públicas de educación superior, así como la educación pública en general, para aportar a la soberanía científica e independencia tecnológica en el país.

Sin embargo, no hizo mención de las universidades privadas y otras organizaciones civiles que también forman parte del SNI. A partir de 2022 los académicos de instituciones privadas dejarán de recibir apoyos económicos, según publicó este diario el pasado 8 de febrero.

Al respecto, dijo que se refirió “a las constructivas reuniones con instituciones privadas, a las que reconozco su disposición de apoyar a sus investigadores. Ante los retos presupuestales, se debe priorizar la atención a la salud y a la formación de los especialistas médicos que el país requiere”.

.Gráfico: La Razón de México

En tanto, agregó que el Conacyt y el Consejo Coordinador Empresarial (CCE) firmaron un acuerdo para impulsar la creación de empresas mixtas con base científica y tecnológica.