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Ucrania rechaza ultimátim de Putin; soldados “lucharán hasta el final”

Rechaza Ucrania entregar Mariupol; Rusia siembra terror

No comerciaremos con regiones ni con nuestra gente, advierte el presidente Zelenski ante ultimátum de Putin; Moscú arrecia ataques

Un hombre camina cerca de un edificio residencial destruido durante el conflicto Ucrania-Rusia en la ciudad portuaria de Mariupol.Foto: Reuters
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Ciudad portuaria y zona clave para Rusia por ser el corredor entre Crimea y Donbás, Mariupol se tambalea entre los ataques enemigos y el drama de al menos cien mi habitantes quienes siguen atrapados en medio de la guerra, mientras el gobierno ucraniano ha rechazado el ultimátum de Moscú para rendirse.

“Lucharemos con todo hasta el final, hasta la victoria, en esta guerra (…) la ciudad aún no ha caído. Nuestras fuerzas militares, nuestros soldados todavía están allí”, aseguró el primer ministro de Ucrania, Denys Shmygal, en una entrevista con la cadena de televisión estadounidense ABC, al tiempo que hizo un llamado para detener “esta catástrofe humanitaria”, pues no hay agua, comida ni calefacción en Mariupol

Pero Mariupol suma su séptima semana de asedio con una crisis humanitaria que va en ascenso que, según estimaciones del propio país invadido, ha causado la muerte de al menos 21 mil personas.

De caer Mariupol, Vladimir Putin lo tendrían más fácil para ir tomando el control del país, pues se espera que sus tropas logren una ofensiva unificada en los siguientes días para hacerse de Donbás, una región industrial que es clave para Rusia por su cercanía con la capital ucraniana, Kiev.

Tan solo ayer, luego de que venciera el plazo impuesto por Putin a su homólogo ucraniano, Volodimir Zelenski, las tropas rusas reforzaron sus ataques y lanzaron misiles a Járkov y Dergachi matando a tres personas e hiriendo a 31, de las cuales hay tres niños; los bombardeos también se extendieron a Kiev, donde los rusos atacaron una planta de municiones en Kiev, mientras se espera que las agresiones se intensifiquen al paso de los días.

la destrucción de nuestros militares, de nuestros chicos, pondría fin a todas las negociaciones, no comerciamos ni con territorios ni con nuestra gente...

Volodimir Zelenski
Presidente de Ucrania

Ante la situación, el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, señaló ayer por la tarde que no entregarían territorios a Rusia para poner fin a la guerra, lo que presagia una fuerte batalla en la tan ansiada Mariupol en la que, de hacerse con la victoria Putin, éste -según expertos- podría usar como estrategia hacia su propio pueblo, ante un escenario polémico por las crecientes bajas rusas y el alza de productos a consecuencia de las sanciones económicas impuestas por Estados Unidos y la Unión Europea.

“Mariupol puede ser como diez veces Borodianka y déjenme decirles que la destrucción de nuestros militares, de nuestros chicos, pondría fin a todas las negociaciones, no comerciamos ni con territorios ni con nuestra gente. Cuantas más Borodiankas haya, más difícil será”, advirtió Zelenski.

“Por eso es muy importante que no se lo permitamos, que nos mantengamos firmes, porque esta batalla puede influir en el curso de toda la guerra”, añadió en una entrevista que dio a un medio internacional.

Posteriormente, Zelenski afirmó que las tropas rusas construyen “cámaras de tortura” y pidió a las naciones del mundo responder con más armas y sanciones más duras contra Rusia.

“Allí se construyen cámaras de tortura. Secuestran a representantes de los gobiernos locales y a cualquiera que se considere visible para las comunidades locales”, manifestó.

Además, agregó que en regiones como Kherson y Zaporizhzhia, las fuerzas de Vladimir Putin están creando estados separatistas e introduciendo la moneda rusa, el rublo.

Pedimos a todos nuestros socios que apoyen y ayuden a detener esta catástrofe humanitaria en Mariupol...

Denys Shmygal
Primer ministro de Ucrania

No nos acostumbremos a la guerra, clama el Papa

en el que debería ser el día más alegre del mundo católico, el papa Francisco hizo un desesperado llamado a la paz en la “insensata” guerra de Ucrania y en otros conflictos armados que asolan el mundo, y citó el “preocupante” riesgo de una guerra nuclear.

“Que haya paz para la Ucrania devastada por la guerra, tan duramente probada por la violencia y la destrucción de esta guerra cruel y sin sentido a la que fue arrastrada”, declaró desde el balcón central de la Plaza de San Pedro.

El Pontífice terminó así de oficiar la Misa de Domingo de Resurrección en la plaza, que estaba repleta de fieles por primera vez desde que comenzó la pandemia en 2020. Muchas de las 50 mil personas en la explanada aplaudieron cuando el pontífice mencionó a Ucrania.

“Por favor, por favor, no nos acostumbremos a la guerra”, suplicó Francisco, quien una vez más condenó la guerra sin citar al presidente ruso, Vladimir Putin, quien tomó la decisión de invadir Ucrania el 24 de febrero.

“Comprometámonos todos a implorar la paz, desde nuestros balcones y en nuestras calles, que los líderes de las naciones escuchen la súplica de la gente por la paz”, agregó.

En clara referencia a la amenaza de una guerra nuclear, citó una declaración de científicos de 1955: “¿acabaremos con la raza humana o la humanidad renunciará a la guerra?”. También llamó la atención sobre otras guerras al pronunciar el discurso conocido por su nombre en latín “Urbi et Orbi”, que significa “a la ciudad y al mundo”.